' Botellons ' de hasta cien personas en las playas de Barcelona en completo re-descanso
La Guardia Urbana detecta cada noche entre 14 y 16 grupos bebiendo alcohol en la vía pública en diversas zonas de la ciudad

ToTBarcelona
La Guardia Urbana de Barcelona está encontrando botellas de hasta un centenar de noches este verano, a pesar de las restricciones para detener el reaprose de Covid-19 que comenzó el mes pasado. Las playas son las zonas de la ciudad donde se encuentran grupos más grandes, pero en otras zonas también se han encontrado de 25 y 50 personas. Ha explicado este jueves por la mañana al jefe de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez,en la presentación del módulo que la unidad de playas del cuerpo se ha estrenado en el espigón de Bogatell, en Sant Martí.
"Los ciudadanos deben saber que si se identifican en botellas pueden ser sancionados. Pero debemos pedir la responsabilidad del pueblo, porque sólo con las denuncias no evitamos estas prácticas, que ponen en peligro la seguridad sanitaria", advirtió el principal intendente de la policía municipal. Como se ha explicado, "La mayor parte del tiempo con el aviso y el desalojado del punto donde se encuentran estos grupos es suficiente". Si los agentes ven una "garantía de que la botella está desactivada" ya dan la acción para terminar, pero cuando observan reticencia y resistencia para cumplir con la instrucción reportada por las partes interesadas.
Cada noche, el urbano se encuentra entre 14 y 16 grupos haciendo botellas en varias partes de la ciudad. Sólo entre el 31 de julio y el 4 de agosto se han producido 190 multas en Barcelona por consumo de bebidas alcohólicas en grupos en espacios públicos, una práctica expresamente prohibida desde hace años por la orden de la civilidad de Barcelona y que como consecuencia de la rebasión de la pandemia la general catalana hainvestigado explícitamente por toda Cataluña.
Collboni: "Estaremos en los delincuentes"
Junto con Velázquez, fue el primer vicealcalde y Jaume Collboni,quien destacó que este año la Unidad de Playa urbana tiene "el doble objetivo de mantener la convivencia y hacer cumplir las medidas sanitarias", ya que "no se puede bajar la guardia, porque los datos de la pandemia son para la esperanza pero aún no son buenos". "Estaremos en los delincuentes para cumplir con las medidas de seguridad sanitaria", añadió.
A partir del 22 de junio, día en que comenzó la temporada de baño -un mes más tarde de lo habitual debido al confinamiento-, la unidad de playa ha presentado 3.843 denuncias por ventas no autorizadas y ha intervenido 30.506 productos,la gran mayoría de latas de cerveza (28.645) y productos textiles (644). También han realizado 14 detenciones y han desoñado la investigación 46 personas más por robo, robo con violencia e intimidación y robos en vehículos estacionados cerca de las playas. También han puesto 499 multas por uso indebido de vehículos de movilidad personal – La gran mayoría, Bicitaxis sin permiso y el resto por uso "riesgo" de scooters – y 44 más para ofrecer masajes en las playas sin ninguna licencia.
Aún así, según Velázquez, estas cifras son mucho más bajas que las de otros años,básicamente porque apenas hay turistas y porque la afluencia media a las playas ha caído mucho: unas 50.000 personas diarias a 32.000, el día que alcanza el máximo permitido por las limitaciones para el Covid-19. "De la misma manera que los hechos delictivos a la totalidad de la ciudad han caído en un 42%, las infracciones también se atenúan en las playas. Todavía no tenemos datos porque hace sólo un mes y ha comenzado la temporada de baño, pero creemos que la caída será superior a este 42%", ha avanzado el intendente mayor.
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