Así era la vida de los gitanos de la Perona, el último barrio de barracas de los 80

Metropoli    .........    VERÓNICA MUR

El Arxiu Fotogràfic de Barcelona (AFB) alberga la conmovedora exposición Esteve Lucerón. La Perona. L’espai i la gent sobre la vida. Las imágenes hablan por si mismas de la miseria que se vivió en el último barrio de barracas de la ciudad. Este espacio de la Verneda, en el que vivieron familias de gitanos entre los años 1980 y 1989 fue derribado antes de los Juegos Olímpicos de la ciudad. 

Un niño gitano posa para Lucerón en La Perona / ESTEVE LUCERÓN - AFB

LA PERIFERIA DE LAS PERIFERIAS

Esteve Lucerón, un fotógrafo comprometido con los problema sociales, fotografió el día a día de esa comunidad gitana ubicada en la periferia de las periferias.

Tal y como se puede ver en las imágenes de la muestra fotográfica que circulan por las redes sociales, el antiguo barrio de barracas en el que ahora se sitúa el parque y la Ronda de Sant Martí era el único lugar en el que vivir para muchas familias de etnia gitana. En las imágenes se puede ver como estas personas malvivían con lo poco que tenían en chabolas, rodeados de morralla y suciedad. 

Familia gitana comiendo y tocando la guitarra en el antiguo barrio de La Perona / ESTEVE LUCERÓN - AFB

HORARIOS Y ENTRADAS

 La exposición fotográfica se puede ver de forma gratuita de lunes a sábado, de 10.00 horas a 19.00 horas; y domingos y festivos, de 10 horas a 14 horas, excepto el 1 de mayo. Aparte de las fotos de Lucerón, la muestra cuenta con textos de Jordi Calafell, fotógrafo y comisario de la exposición y Manolo Laguillo, fotógrafo.

La exposición fotográfica se puede ver de forma gratuita de lunes a sábado, de 10.00 horas a 19.00 horas; y domingos y festivos, de 10 horas 

La exposición fotográfica se puede ver de forma gratuita de lunes a sábado, de 10.00 horas a 19.00 horas; y domingos y festivos, de 10 horas a 14 horas, excepto el 1 de mayo. Aparte de las fotos de Lucerón, la muestra cuenta con textos de Jordi Calafell, fotógrafo y comisario de la exposición y Manolo Laguillo, fotógrafo.

Una de las calles entre barracas de la Perona / ESTEVE LUCERÓN - AFB