Después de varios meses en subida, el precio de los carburantes fósiles ha cogido carrerilla impulsado por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania y el coste por cada litro de gasolina y de diésel se ha disparado. Se están superando, en ambos carburantes, los máximos históricos registrados hasta ahora y el barril de Brent ya se cobra en los 139 dólares, algo insólito desde el pasado 2008. 

¿Cómo repercute esto a los conductores y a los transportistas? Pues en un encarecimiento de lo que hay que pagar cada vez que se visita una gasolinera. En concreto, este jueves 10 de marzo los conductores que vayan a una estación de servicio a repostar pagarán de media 1,845 euros por cada litro de gasolina sin plomo 95 y 1,991 euros en el caso de la sin plomo 98. Hablando del diésel, el gasóleo A cuesta hoy 1,809 euros por litro de media y el A+, 1,902 euros.

Estas cifras representan un aumento en comparación con las cifras de venta de ayer. En el caso de la gasolina sin plomo 95, el precio ha subido de los 1,832 euros por litros y diésel ayer costaba 1,783 euros por litro. El crecimiento ha sido muy acusado en las últimas semanas y las cifras de hoy vuelven a marcar máximos históricos al igual que ayer.

Las gasolineras más caras y más baratas

Las cadenas de gasolineras con el carburante más caro son Repsol, Cepsa y Galp con precios de 1,829€/l, 1,757€/l y 1,745€/l respectivamente para la gasolina sin plomo 95. Para el diésel, el precio medio es de 1,803€/l, 1,706€/l y 1,714€/l en cada una de las estaciones de estas cadenas. 

Por otro lado, las cadenas low cost siguen siendo Alcampo, BonÁrea y Ballenoil, con los precios medios más baratos del mercado. La gasolina sin plomo 95 se queda en los 1,662€/l, 1,695€/l y 1,785€/l en cada una de ellas y el gasóleo es más barato: 1,619€/l1,695€/l y 1,753 €/l respectivamente.