Barcelona se adelanta a la alerta por sequía y ya aplicará restricciones de agua este miércoles

El Ayuntamiento de Barcelona cerrará los manantiales de fuentes ornamentales que usan agua potable y trasladará por la noche buena parte del riego de árboles

Aunque la alerta por sequía en la cuenca Ter-Llobregat no se activará oficialmente hasta este viernes, Barcelona se adelantará y ya empezará a aplicar las restricciones de agua en la ciudad a partir de este miércoles, 23 de noviembre. El concejal de Emergencia Climática, Eloi Badia, ha asegurado que "en esta fase de alerta podemos estar tranquilos" y que los barceloneses casi "no percibirán" las medidas antisequera.

La razón es que en los últimos años en la ciudad ya se ha contenido de forma considerable el consumo de agua, pasando de los 170 litros por persona y día (en el año 2008, en el último episodio de sequía grave) a los147 litros por persona y día actuales. Estos datos engloban todos los usos de agua de la ciudad, bien sean domésticos, industriales o de los servicios municipales. Desde entonces el Ayuntamiento de Barcelona también ha impulsado el aprovechamiento de agua freática, en sustitución de agua potable.

¿Qué restricciones habrá en Barcelona?

A pesar del poco impacto que tendrá el decreto de sequía en la ciudad, lo cierto es que Barcelona sí impondrá algunas restricciones. A pie de calle, la más visible será elcierre de las fuentes ornamentales que usan agua potable: representan un 42 % del total de fuentes ornamentales. El resto funcionan con agua freática y, por lo tanto, seguirán brotando con normalidad. Las fuentes públicas para hidratarse no sufrirán restricciones.

También habrá cambios en el riego del arbolado. Todo lo que utilice agua potable se trasladará por las noches, entre las 20 y las 8 h del día siguiente, las horas de menos sol. La limpieza de calles con agua(el conocido como aguante)no sufrirá ninguna restricción porque la mayoría de camiones, un 80 %, ya utilizan agua freática.

En cuanto a los equipamientos deportivos municipales, en un principio también tienen sistemas de aprovechamiento del agua que les permitirá seguir funcionando con normalidad.

Las fincas con piscina y jardín, bajo la lupa

De forma generalizada, las medidas antisequera no tienen impacto en el uso doméstico del agua porque se mantiene tal y como está el abastecimiento de agua para beber. Ahora bien, el concejal Eloi Badia ha avisado de que el decreto de la Generalitatprohíbe llenar piscinas y regar jardines más de dos veces por semana en las fincas particulares, así como tampoco permite lavar coches con manguera.

En este sentido, la empresa concesionaria del agua (Aguas de Barcelona, en el caso de la ciudad),controlará los consumos de estas fincas privadas y, si detecta que no se han reducido, avisará al Área Metropolitana de Barcelona (que es la competente en el abastecimiento de agua). En el caso de que se demuestre que una comunidad de vecinos se ha saltado las prohibiciones del gobierno catalán, se les podría imponer una sanción.