La Agencia de Salud Pública asegura que hace seguimiento de la zona contra las ratas, mientras el Ayuntamiento prevé reforzar la limpieza
Ha pasado un año y medio desde la inauguración oficial de la reurbanización de la manzana entre las calles de Aiguablava, Portlligat y Nou Barris, pero los vecinos denuncian que este gran espacio se empieza a degradar debido a la falta de limpieza y de mantenimiento. Especialmente de los parterres y zonas verdes, lo que favorece los caos de ratas. "Es una selva, y eso supone una ventaja para las ratas, tienen donde esconderse", afirma Miquel Batet, uno de los vecinos de la isla. "Hay caos de ratas, suben por las paredes, entran dentro de las casas. Se ven muchas y la gente tiene miedo", añade José Rocas, presidente de la Mesa Abierta de la Trinitat Nova.
La Agencia de Salud Pública hace seguimiento del problema de ratas
En este sentido, la Agencia de Salud Pública tiene identificado el problema desde el mes de octubre, y tras hacer tratamiento con punto de control, afirma que está haciendo seguimiento, así como en la cercana plaza de las Mujeres de Nou Barris.

En cuanto al mantenimiento del espacio, el Ayuntamiento asegura que tiene previsto reforzar su limpieza con un operativo que actuará tres veces por semana. Este es para los vecinos un punto indispensable, junto con el cuidado de los espacios ajardinados. "Si se ve degradado, a la gente le cuesta más respetar y empiezan a abrir caminos entre parterres y se corre el riesgo de que se degrade más", lamenta Batet.
Una reurbanización muy reivindicada
Los vecinos, hoy por hoy, se sienten decepcionados. Lucharon mucho para que se renuevaran unos espacios interiores que no se habían tocado desde los años 60. Participaron en el diseño de la reforma y quedaron satisfechos de la reforma, con la que han ganado mucho en accesibilidad, con rampas, un ascensor que los comunica con el metro y la calle de Aiguablava. El proyecto supuso una inversión de seis millones de euros del Plan de barrios y reformó el espacio que da acceso a una quincena de bloques.
A la espera del soterramiento de cables aéreos
Pero para el vecindario, el proyecto todavía está incompleto. La reurbanización tuvo en cuenta conducciones para soterrar los cables de fibra óptica y telefonía. La realidad, sin embargo, es que las empresas todavía no han hecho nada al respecto y los cables cuelgan de fachadas y entre bloques.

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