Dos meses después de haber sobrevivido a un intento de magnicidio durante un mitin en Pensilvania, el expresidente estadounidense Donald Trump se ha visto envuelto de nuevo en otro tiroteo, en esta ocasión en su club de golf en West Palm Beach (Florida). El candidato republicano, que se encontraba en ese momento jugando en el campo, ha salido ileso y ha sido puesto "a salvo" en un incidente que el FBI está investigando como un "intento de asesinato".

El sospechoso ha sido detenido en las inmediaciones del campo de golf poco después gracias al aviso de un testigo, que avisó al Servicio Secreto. El individuo tenía un rifle AK47 con una mirilla con el que, presumiblemente, quería atacar al candidato republicano, y contaba también con dos mochilas y una cámara deportiva GoPro, según ha detallado en rueda de prensa el sheriff Rick Bradshaw. 

Después de ser visto por el Servicio Secreto con un rifle junto a la valla del campo de golf, los agentes le dispararon y este salió corriendo de entre unos arbustos en los que se estaba escondiendo, hasta el vehículo en el que intentó huir, una camioneta negra cuya matrícula logró fotografiar un testigo. Gracias a esto fue detenido unos minutos después en la carretera y fue identificado como Ryan Wesley Routh, de 58 años. Según la prensa local, el detenido había sido condenado hace más de 20 años por posesión de una ametralladora. 

El equipo de campaña del candidato republicano fue el primero en comunicar lo ocurrido: "El presidente Trump está a salvo tras registrarse disparos en su entorno", indicaron en un escueto comunicado.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha anunciado que el estado llevará a cabo su propia investigación sobre el intento de asesinato del exmandatario. "La gente merece saber la verdad sobre el posible asesino y cómo logró acercarse a menos de 500 metros del expresidente y actual candidato republicano", ha escrito en X el gobernador.

El incidente tuvo lugar poco antes de las 14.00 de la tarde, hora local (las 20.00 hora peninsular española), según han informado desde el Servicio Secreto. El sospechoso se encontraba armado a una distancia entre 270 - 450 metros del republicano cuando fue detenido por las autoridades. "Con un rifle y una mirilla como esa, no es una gran distancia", ha valorado el sheriff Bradshaw.

Dos fotografías muestran un rifle AK-47, una mochila y una cámara Go-Pro localizadas en una verja fuera del club de golf de Donald Trump, momentos después de su intento de asesinato.
Dos fotografías muestran un rifle AK-47, una mochila y una cámara Go-Pro localizadas en una verja fuera del club de golf de Trump.

Las fuerzas del orden han asegurado en rueda de prensa que el campo de golf donde estaba Trump está rodeado de arbustos y que cuando alguien se esconde en ellos queda prácticamente "fuera de la vista". Según han dicho, la seguridad está limitada a la zona que el Servicio Secreto considera factible y esa organización "hizo lo que tenía que hacer".

Pocas horas después del ataque, el propio Trump ha afirmado que se encuentra bien: "Hubo disparos cerca de mí, pero antes de que los rumores comiencen a salirse de control, quiero que escuches esto primero: ¡ESTOY A SALVO Y BIEN!", ha apuntado en un comunicado de prensa. El candidato republicano a la presidencia estadounidense ha añadido que "nada" le detendrá. "¡Nunca me rendiré!", ha exclamado.

El candidato republicano a vicepresidente, JD Vance, ha asegurado que habló con Trump momentos antes de que se hiciese pública la noticia del ataque y que "se encontraba sorprendentemente de buen ánimo".

Por su parte, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho estar "aliviado" al saber que el candidato republicano a las elecciones presidenciales, Donald Trump, está ileso después de un posible intento de asesinato.

"Un sospechoso está detenido y elogio el trabajo del Servicio Secreto y sus socios en la aplicación de la ley por su vigilancia y sus esfuerzos para mantener a salvo al expresidente y a quienes lo rodean. Me siento aliviado de que el expresidente está ileso", ha anotado Biden en un comunicado.

El demócrata, además, ha ordenado a su equipo que "continúe asegurando que el Servicio Secreto tenga todos los recursos, la capacidad y las medidas de protección necesarias para garantizar la seguridad continua del expresidente".