Una nueva tecnología permitirá identificar el sexo de las poblaciones megalíticas peninsulares

 

Hasta hace muy poco, la bioarqueología no podía determinar con certeza el sexo biológico de las personas enterradas en las monumentales tumbas megalíticas. Los métodos de la antropología tradicional, aunque útiles, son a menudo insuficientes. Hay que tener en cuenta diversos aspectos como el estado de conservación de los restos óseos, las diferencias entre los esqueletos de hombres y mujeres dentro de una población determinada, así como la formación y experiencia de los y las profesionales de la antropología. 

En el caso de la población infantil esta diferenciación sexual es bastante más compleja, aunque en la población adulta tan solo la pelvis y el cráneo son las regiones anatómicas que presentan los rasgos más diferenciadores. Sin embargo, estos huesos rara vez se encuentran completamente preservados.

En el mejor de los casos, cuando se analizan esqueletos que han sido enterrados de forma individual, y se encuentran completos y bien conservados, la combinación de métodos antropológicos tradicionales permite obtener una estimación del sexo con mayor precisión. No obstante, cuando los restos humanos aparecen dispersos, mezclados y fragmentados, el diagnóstico tiende a ser más limitado.

investigación pionera

Esto ocurre frecuentemente en las tumbas megalíticas, donde se enterraba a un número elevado de personas en diferentes períodos de tiempo, con lo que se creaba un conjunto de restos óseos difícil de analizar. De hecho, tan solo en algunos casos puede establecerse la estimación de sexo de las personas enterradas, lo que dificulta el estudio de la demografía antigua de las poblaciones.

Y es que aunque a lo largo de décadas de investigación, las tumbas megalíticas han revelado una gran cantidad de información sobre las prácticas funerarias y la vida de nuestros antepasados, aún existía un gran vacío en cuanto a la comprensión de la composición demográfica de estas sociedades, especialmente en lo que respecta a la población infantil.

Ahora, gracias al proyecto, financiado por la Fundación Palarq, "Análisis de péptidos para la identificación sexual de las poblaciones megalíticas de la necrópolis de Los Milanes (Abla, Almería)", liderado por la investigadora posdoctoral Miriam Vílchez Suárez y la catedrática de Prehistoria Marga Sánchez Romero, ambas del Grupo de Investigación "GEA. Cultura material e identidad social en la Prehistoria Reciente en el sur de la península ibérica", de la Universidad de Granada, este vacío podría empezar a desaparecer.

De hecho, ello puede ser posible gracias a la implementación de una técnica revolucionaria basada en el estudio de proteínas: el análisis de péptidos de amelogenina en el esmalte dental, considerada como uno de los métodos más fiables para determinar el sexo biológico y que está creando un profundo cambio en la percepción que hasta ahora se tenía de las sociedades prehistóricas. 

Esta técnica se basa en el análisis del esmalte dental, el tejido más resistente del cuerpo humano y menos susceptible a los efectos de la descomposición, lo que lo convierte en una fuente ideal para la extracción de material genético. El esmalte dental contiene una proteína que se conserva extraordinariamente bien llamada amelogenina, que juega un papel crucial en el desarrollo de los dientes y está vinculada a los cromosomas sexuales. 

Y ¿en qué consiste esta novedosa técnica de análisis? La amelogenina es una proteína que presenta diferencias entre hombres y mujeres. Por tanto, al analizarla es posible identificar el sexo cromosómico con una alta tasa de éxito. En particular, se han identificado dos versiones de la proteína, una asociada al cromosoma X (AMELX) y otra al cromosoma Y (AMELY). Por tanto, las diferencias entre estas dos isoformas permiten identificar si la muestra recogida del diente proviene de un hombre o de una mujer. 

Miriam Vílchez y Marga Sánchez han logrado poner en marcha una iniciativa que, por primera vez, pretende determinar el sexo cromosómico de las personas que fueron enterradas en la necrópolis de Los Milanes, un importante yacimiento megalítico ubicado en la provincia de Almería. Este análisis no solo incluirá a los individuos adultos, sino que también prestará atención a la población infantil, un grupo poblacional que tradicionalmente ha pasado desapercibido.

más allá de las diferencias sexuales

La necrópolis de Los Milanes es Bien de Interés Cultural desde 2006 y constituye un conjunto de 18 tumbas colectivas tipo tholos situadas en un promontorio, frente al poblado denominado El Peñón de las Juntas, en Abla, Almería. Hasta el momento, la necrópolis no había sido objeto de excavaciones hasta el trabajo iniciado en 2023 por el equipo de la Universidad de Granada.

Tanto el poblado como la necrópolis se sitúan en la cuenca del río Nacimiento, en el denominado como pasillo de Fiñana, un paso natural que comunica la comarca de los altiplanos granadinos con el valle del Andarax y Almería. La necrópolis se localiza, por tanto, en una importante vía de comunicación delimitada por los macizos montañosos de Sierra Nevada y la Sierra de Los Filabres, lo que hace del yacimiento un lugar estratégico en la Prehistoria del sureste ibérico.

Las excavaciones llevadas a cabo en 2023 y 2024 han arrojado datos muy interesantes. Además de los restos inhumados documentados en otras tumbas, en el interior de una de ellas se excavó un depósito funerario excepcional formado por miles de restos óseos humanos cremados, según la investigación, poco después de la muerte. Esto representa un cambio en el ritual funerario durante en el III milenio a.C. desconocida hasta el momento en el sureste peninsular.

A partir de la aplicación del análisis de péptidos de amelogenina y de la obtención de los resultados, se llevarán a cabo estimaciones de la demografía antigua mucho más precisas, lo que es esencial para reconstruir cómo era la vida y la muerte en esta zona geográfica durante el III milenio a.C.

De hecho, más allá de la simple clasificación de las personas como hombres o mujeres, el proyecto pretende abrir nuevas vías para explorar cuestiones como las posibles diferencias en el estatus social asociadas al sexo y las implicaciones culturales y sociales de las prácticas funerarias en las sociedades megalíticas. La investigación, por ejemplo, incidirá en aspectos cómo el papel que jugaban los niños en la comunidad según su sexo y documentar si existen diferencias en el tratamiento funerario asociadas al sexo. 

En suma, este proyecto proporcionará una visión más clara y detallada de la Prehistoria en el sureste de la península ibérica durante el III milenio a.C. No solo en cuanto al estudio de las poblaciones megalíticas del sureste peninsular, sino también para contribuir al conocimiento del megalitismo peninsular en general, mejorando las capacidades de lo expertos para estudiar poblaciones antiguas con un grado de detalle nunca antes alcanzado.