Detenido en Madrid un capo de la mafia italiana tras ser identificado en una imagen de Google Maps
Gioacchino Gammino, que llevaba 20 años fugado, fue captado por la cámara en una frutería de Galapagar.
El líder mafioso italiano Gioacchino Gammino, de 61 años de edad y perteneciente a la Cosa Nostra siciliana, fue detenido el pasado mes de diciembre en Galapagar, tras haber sido identificado en una imagen de Google Maps, en la que aparece frente a una frutería de la localidad madrileña.
Gammino, que vivía en España bajo el nombre falso de Manuel, era buscado por las autoridades italianas desde que, hace 20 años, en 2002, escapó de una prisión de Roma, y fue condenado a cadena perpetua por asesinato el año siguiente. Los detalles de su arresto en Madrid los reveló este jueves el diario romano La Repubblica.
La Policía italiana ya sospechaba desde hacía tiempo que Gammino se encontraba en España, y, desde hacía dos años, según confirmaron este mismo jueves a El Periódico fuentes policiales italianas, lo había situado precisamente en Galapagar.
Fue, no obstante, la foto en Google Maps lo que acabó confirmando las sospechas.
Menú siciliano
Tras ver la imagen en la que un hombre aparece conversando con otra persona frente a un negocio de alimentación llamado La huerta de Manu, la Policía logró dar con una página de Facebook perteneciente a un restaurante denominado Cocina de Manu (ahora cerrado), que tenía platos sicilianos en el menú, y se encontraba en las proximidades del negocio visto en Google Maps. Ambos establecimientos eran gestionados por Gammino.
En la página de Facebook, además, aparecían publicadas fotos del propio Gammino vestido de chef y promocionando el establecimiento. El fugitivo fue identificado por una cicatriz en su barbilla.
"¿Cómo me han encontrado?"
Una vez localizado y confirmada su identidad, la Policía procedió a su detención inmediata. El arresto lo llevaron a cabo el pasado 17 de diciembre agentes de la Brigada Central de Estupefacientes (UDYCO), el cuerpo español que había colaborado con las autoridades italianas en el caso.
"¿Cómo me han encontrado? Ni siquiera he llamado a mi familia en diez años", dijo Gammino a la Policía tras ser detenido, según recoge La Repubblica.
La detención de Gammino pone fin a una huida que comenzó en 2002 de un modo igualmente rocambolesco, ya que el capo se fugó de la cárcel haciéndose pasar por el visitante de un preso, aprovechando los momentos de confusión creados por la filmación de una película.
Ataque en Barcelona: Un hombre roba y agrede a un sintecho
Metropoli ..........
Los Mossos d'Esquadra han detenido in fraganti a un ladrón multirreincidente mientras cometía un robo violento contra una persona sintecho en Barcelona, a quien ha empujado por la espalda y, una vez al suelo, le ha propinado patadas en la cabeza y le ha registrado los bolsillos buscando objetos de valor.
Según ha informado la policía, el detenido es un joven de 21 años que acumula una veintena de antecedentes y que, en el momento de ser arrestado, llevaba encima el teléfono móvil que supuestamente había robado el día anterior a una vecina del barrio del Poble Sec de Barcelona.
AGRESIÓN EN BARCELONA
La detención se ha producido esta pasada madrugada en la avenida Paral·lel de Barcelona, después de que una patrulla de los Mossos ha visto como el joven asaltaba por la espalda a un hombre --que acostumbra a dormir por la zona-- que andaba por la calle, y le ha hecho caer de un empujón.
Una vez la persona sintecho estaba en el suelo, el agresor le ha propinado patadas en la cabeza y le ha registrado los bolsillos buscando objetos de valor, si bien los agentes han llegado rápidamente y lo han podido arrestar in franganti.
LESIONES
La víctima ha sido atendida por el Sistema de Emergencias Médicas y trasladado a un centro hospitalario con lesiones leves.
Los Mossos se han puesto en contacto con el Servicio de Atención Social del Ayuntamiento de Barcelona para poner en conocimiento los hechos para hacer un seguimiento de la víctima y atenderla y han confirmado que actualmente está vinculado a una de las entidades de servicios sociales, que ya le hace seguimiento.
Grandes aglomeraciones en la cabalgata de los Reyes Magos de Barcelona. Tal y como ha podido presenciar Metrópoli, miles de personas han salido a las calles para disfrutar del desfile navideño, a pesar de la compleja situación pandémica.
Según se puede ver en el vídeo realizado por este medio, los asistentes se han agolpado a ambos lados de la vía Laietana para disfrutar en directo de la típica cabalgata barcelonesa. Aunque el Ayuntamiento de Barcelona afirmó que el desfile se llevaría a cabo siguiendo las recomendaciones, el resultado ha sido muy distinto: miles de personas sin distancia de seguridad y muchas de ellas sin mascarillas.
LA CABALGATA, DESACONSEJADA POR EXPERTOS
Según el documento por el Govern, las cabalgatas de Reyes podían realizarse "siempre que cumplan un conjunto de recomendaciones, como evitar las aglomeraciones". Ante el aviso, Ada Colau afirmó que la administración barcelonesa ya tenía "preparada" la cabalgata y que haría "todo lo posible" para celebrarla.
La cabalgata de Barcelona estuvo en el punto de mira durante semanas a causa del repunte de contagios desencadenado por la variante Ómicron. Científicos y sanitarios desaconsejaron su celebración. Una experta del Hospital del Vall d'Hebron, la doctora Magda Campins, desaconsejó que se celebrasen este tipo de actos. También el popular epidemiólogo Oriol Mitjà consideróque se deberían evitar todas las situaciones con acumulaciones de gente: "Nada de cabalgatas", sentenció.
Grandes aglomeraciones de personas esperando a la cabalgata de Barcelona / METRÓPOLI
Encuentran 620 kilos de cocaína en una aspa con destino a Barcelona
Metropoli .........
La Guardia Civil encontró el pasado martes 620 quilos de cocaína en una gran aspa de 12 toneladas de peso que tenía como destino el puerto de Barcelona. La pieza fue enviada desde Panamá y el destinatario era un hombre residente en Lleida que ha sido detenido.
Los agentes trasladaron el rotor a Lleida y abrieron la pieza con la ayuda de los Bomberos de la Generalitat. En el interior hallaron 537 paquetes envueltos en plástico llenos de droga, según publica esta mañana el diario El Segre.
ANOMALÍAS EN EL ROTOR
La investigación arrancó hace unos días a finales de diciembre en el puerto de Barcelona cuando la Unidad de Análisis de Riesgos de la Aduana de Barcelona detectó un envío sospechoso procedente del país americano. El 4 de enero se detectaron anomalías en el interior del rotor.
Cada paquete contenía 1.050 gramos de polvo blanco. Los 620 quilos decomisados habrían alcanzado en la calle un valor de 20 millones de euros. Se trata de uno de los decomisos más importante en los últimos años en Lleida. Con la detención del supuesto destinatario de la droga, la Guardia Civil considera que ha desarticulado una organización criminal.
L'Eixample registró durante los tres primeros meses de 2021 un total de 2.455 hurtos. Es el distrito de Barcelona que más robos de este tipo ha sufrido, muy lejos de los 1.705 hurtos de Ciutat Vella. Este robo, cometido al descuido y sin emplear violencia, es el delito más común en la mayoría de las grandes ciudades. También en la capital catalana.
Los Mossos d'Esquadra registran en su base de datos un historial con los principales delitos. También tiene en cuenta los robos violentos, en concreto, los robos con violencia cometidos contra personas y los robos con fuerza, principalmente asaltos en viviendas de particulares, empresas y locales. De nuevo, el Eixample lidera esta clasificación criminal extraída de la base de datos pública de la policía catalana.
316 VÍCTIMAS
Durante el primer trimestre del año pasado 316 personas fueron víctimas de un robo violento en las calles del céntrico distrito diseñado por Ildefons Cerdà. Los pisos y negocios de la zona sufrieron 241 robos. En Ciutat Vella se vivieron casi la misma cifra de robos violentos contra personas. En el distrito del Raval, el Gòtic, la Barceloneta i Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera los ladrones robaron a 318 ciudadanos. La cifra de detenciones por este delito, sin embargo, se dispararon en estos barrios con 114 arrestos frente a los 58 del Eixample.
El dron de los Mossos d'Esquadra detectó la presencia de varios ladrones en la fiestas de Sarrià / METRÓPOLI
Los casos de robos resueltos por los Mossos d'Esquadra en Ciutat Vella (104) también es mucho más alto que en el distrito vecino (70). La policía obtuvo resultados similares en el caso de los robos en edificios. Los agentes detuvieron a 67 presuntos ladrones en el corazón de Barcelona y 62 en l'Eixample. En este último esclarecieron 76 robos mientras que en el primero 78.
CAEN LOS ROBOS CON FUERZA EN LA CIUDAD
El Ministerio de Interior, que centraliza las denuncias de los Mossos d'Esquadra, la Guardia Urbana de Barcelona, la Guardia Civil y la Policía Nacional, ofrece un panorama más amplio de lo que ha sido 2021 en términos delictivos en la ciudad. Su balance de criminalidad entre enero y septiembre refleja una fuerte caída del 21% de los robos con fuerza en interior de domicilios y establecimientos. En todos los distritos se registraron 3.881 robos frente a los 4.924.
Los robos con violencia en la ciudad en general sí que aumentaron respecto al 2020. El año pasado se produjeron cerca de 7.400 en comparación con los casi 7.000 de hace dos años. Por distritos, Sant Martí es la tercera zona con más robos aunque supera a l'Eixample en número de detenciones por robos con violencia. Allí, los agentes detuvieron a 91 delincuentes por asaltar con violencia a su víctima. El distrito que linda con Sant Adrià de Besòs a través del barrio barcelonés de Besòs i Maresme y La Mina sumó un total de 505 robos.
GRÀCIA Y LES CORTS, EN LA COLA DE LA LISTA
Por contra, Gràcia y Les Corts son las zonas de Barcelona con menos robos. En la primera categoría, la de robos con violencia empatan en 103 robos. Los robos con fuerza representan una fuerza aun menor. con 72 y 136 delitos respectivamente.
Las agresiones sexuales con penetración (violaciones) se dispararon en Barcelona entre enero y septiembre de 2021. Así lo reflejan los datos del Ministerio de Interior, que recoge la información de Mossos d'Esquadra, Guardia Urbana, Policía Nacional y Guardia Civil. Las policías recibieron 129 denuncias por este delito frente a los 81 registrados el mismo período de tiempo de 2020, lo que supone un aumento del 59,3%.
Los tres meses del estado de alarma declarado al inicio de la pandemia (entre marzo y junio) podrían explicar este aumento de casi 50 casos más. El Código Penal español castiga con penas de entre 6 y 12 años de cárcel este tipo de delitos para el que es necesario que exista penetración (ya sea vía vaginal, anal o bucal) y que se use la violencia o la intimidación. En el delito de agresión básico el atacante también usa la violencia, pero no existe la penetración. En estos casos, los agresores se enfrentan a una pena inferior, de entre 1 y 5 años de prisión.
LOS HURTOS CAEN UN 13%
La violación es el delito contra la libertad sexual más grave de nuestro sistema jurídico. El conjunto de estas conductas –que también contemplan los abusos sexuales, el acoso o el ciberacoso, entre otros– aumentaron un 32,6% el año pasado. Un total de 659 posibles víctimas denunciaron alguno de estos delitos en las distintas comisarías de la ciudad. En 2020 fueron 497, según el balance de criminalidad del Gobierno.
Los hurtos destacan por encima de todos los delitos. Las distintas policías con competencias en Barcelona cifran en 37.101 los robos sin violencia –al descuido– que se cometieron durante los primeros tres trimestres del año pasado. Contra todo pronóstico, supone una caída del 12,9% de hurtos respecto a los 42.598 de 2020. Estos robos se redujeron prácticamente a cero durante, al menos, el período del estado de alarma y el confinamiento total de la población (mediados de marzo hasta principios de junio). Si se compara con 2019 la caída es en picado, pues ese año se registraron 84.258 hurtos, una cifra muy similar a la de 2018.
LA INSEGURIDAD, PRINCIPAL PROBLEMA PARA LOS VECINOS
Los robos con violencia (los cometidos contra personas) aumentaron un 6,2% en la ciudad (de 6.950 a 7.378 asaltos). En cambio, los robos con fuerza en domicilios y establecimientos disminuyeron un 21,%. También se redujeron los robos de coches (-9,4%) aunque el delito de tráfico de drogas se disparó un 26,6% (de los 583 delitos de 2020 a los 738 de 2021).
Destrozos en la plaza de Espanya durante el botellón masivo de la Mercè / ARCHIVO
Barcelona registró un total de 91.434 delitos entre enero y septiembre del año pasado, un 2,9% menos que en 2020. Es un delito cada cuatro minutos. Estos datos desiguales hacen difícil marcar una tendencia, en principio ligeramente a la baja. Sin embargo, los barceloneses perciben la inseguridad como el principal problema que tiene la ciudad. Y esto ocurre desde 2018. Un 20,8% de la ciudadanía consultada por el mismo Ayuntamiento en el último barómetro de este 2021 considera que los delitos aumentan y que las administraciones no hacen suficiente para atajarlo. Este indicador se dispara un 7% en comparación con la encuesta de julio. Desde hace tres años, los vecinos siguen colocando la seguridad como máxima prioridad. El gobierno de Ada Colau suspende en seguridad y las cifras así lo demuestran.
La antigua activista antidesahucios tomó la vara de mando de la ciudad en 2015 cuando la inseguridad solo preocupaba a un 4% de los habitantes de Barcelona. Esa cifra ha ido subiendo progresivamente año tras año hasta que en diciembre de 2018 se disparó con el 21% de los ciudadanos mostrando su máxima preocupación por los delitos cometidos en la urbe. En 2019 se registró un pico histórico con un 29% de los barceloneses alertados por la inseguridad en la capital catalana. Jamás en los últimos 30 años (desde 1991) se había alcanzado esa cifra.
MÁS DELITOS CONTRA LA LIBERTAD SEXUAL
Los hurtos son los delitos que más se repiten. El ha contabilizado 37.101 hurtos entre enero y septiembre de 2021, un 12% menos que durante el mismo período de tiempo de 2020. Los tres meses del estado de alarma de ese año (marzo a junio) con una población clausurada en casa explica el descenso de los robos sin violencia cometidos que se cometen en la calle, el transporte público y lugares públicos.
Los datos de Interior muestran que los delitos contra la libertad sexual (violación, agresión sexual, abuso, acoso, ciberacoso y exhibicionismo) son los que más han aumentado. Lo han hecho un 27,4%. Las policías han recibido 530 denuncias en comparación con las 416 de 2020. De nuevo, los tres meses de confinamiento podrían explicar este repunte. En todo caso, será necesario analizar el mismo dato en 2022 para confirmar esta relación.
MULTIREINCIDENCIA
Barcelona tiene un problema con la multirreincidencia. Durante la primera mitad del año pasado, los Mossos d'Esquadra (competentes en la investigación de los delitos penales como robos, tráfico de drogas y los relacionados con la libertad sexual) y la Guardia Urbana detectaron a 143 ladrones con decenas de antecedentes cada uno. Entre todos acumulaban cerca de 4.500. Los agentes habían logrado detener a 111 de ellos, la mayoría por robos con violencia en la calle.
Agentes de la Guardia Urbana en las fiestas de Sarrià de 2021 / GUILLEM ANDRÉS
Hace una semana, el concejal de Cultura, Jordi Martí (Barcelona en Comú) tachaba de "sorprendente" el crecimiento de la inseguridad como principal problema para sus ciudadanos. Explicó que "los datos delincuenciales están por debajo de los de 2019" y apeló a la "percepción" para justificar este resultado desde el punto de vista del gobierno municipal. Pero atendiendo al último barómetro, los datos reflejan que la gestión del gobierno de Colau es cada año peor. Esa es, al menos, la percepción que tienen los ciudadanos.
"LA CIUDAD HA EMPEORADO PARA UN 64%"
En la última encuesta el Ayuntamiento preguntó a 802 vecinos sobre el estado de la ciudad, la valoración de los portavoces políticos, el cambio climático y la economía, entre otros. El 63,8% de los consultados opina que la ciudad ha empeorado. Esa cifra era del 30% en junio de 2015 cuando Colau aterrizó en la plaza de Sant Jaume, en 2017 un 40% lo pensaba y en 2019 un 54%. La subida es exponencial hasta la malísima nota del diciembre pasado.
Por contra, la cantidad de ciudadanos que piensa que Barcelona mejora cae en picado. Solo un 19,4% considera que la situación general es mejor, la mitad que en 2015. Entonces, un 42% de los encuestados pensaban que la ciudad había mejorado en el momento de ser consultados.
ROBOS CONTRA TAXISTAS
El último barómetro se realizó en noviembre con el recuerdo de los altercados del macrobotellón de la plaza de Espanya muy frescos en la memoria de los barceloneses. Recientemente, la inseguridad en forma de robos con violencia contra los taxistas ha enfurecido a un sector que la semana pasada colapsaba la Gran Via durante dos horas para reivindicar una vieja petición: la instalación de cámaras de seguridad que el Institut Metropolità del Taxi (IMET) rechaza. Los conductores avisan a este organismo, en el que el Ayuntamiento tiene mucho peso, que no dejaran de manifestarse hasta conseguir más seguridad en sus vehículos.
LA INSEGURIDAD DE TRIAS, ANECDÓTICA
La evolución de los barómetros que el consistorio registra desde 1991 muestra que la percepción ciudadana sobre la inseguridad es cíclica. Si bien en diciembre de 2019 se registró la cifra más preocupante en relación a este indicador con un 29% de los ciudadanos alertados por este problema, las encuestas de los últimos 30 años han mostrado a una ciudadanía preocupada en menor o mayor medida por los delitos.
En el último mandato del socialista Joan Clos, por ejemplo, (1997-2006) la inseguridad fue el principal problema para los barceloneses durante seis años seguidos. En marzo de 2002 preocupaba al 27% de los ciudadanos y en marzo de 2003 al 28%. El también socialista Jordi Hereu (2006-2011) descendió esa cifra hasta el 10%, pero llegó a picos del 20%. Fue el alcalde Xavier Trias (CiU) el que logró que la inseguridad fuera un problema anecdótico entre la ciudadanía consiguiendo en una encuesta que solo el 3% de la ciudadanía lo percibiera como el principal escollo a resolver. Para hacer justicia con Clos, el exalcalde se acercó a estas cifras al principio de su mandato, entre 1997 y 1999.
