lunes, 4 de marzo de 2024

El Gobierno allana la llegada de conductores de autobús de Marruecos y también los busca en América ante la falta de profesionales

 20Minutos


Feria Internacional Del Autobús Y Del Autocar (FIAA)

La profesión de conductor de camiones de mercancías y de autobuses de pasajeros ha dejado de ser una actividad atractiva, de esas que los hijos quieran heredar de los padres, y España acusa, como buena parte de la UE, una falta de profesionales que intenta paliar facilitando la llegada de chóferes de Marruecos, con quien el Gobierno acaba de firmar un acuerdo para ello. Compañías y el Ministerio también ponen la vista más lejos y miran hacia países de América Latina para reforzar unas plantillas que, además de escasas, están envejecidas y para las que los sindicatos reclaman el derecho a la jubilación anticipada.

Precisamente, facilitar la llegada de conductores de camiones y autobuses desde Marruecos fue uno de los acuerdos que cerraron España y Marruecos durante la visita, hace dos semanas, del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al país norteafricano. Pactaron el reconocimiento recíproco y el canje de los permisos de conducción nacionales, de modo que trabajadores marroquíes puedan trabajar al volante en España -y en toda le UE-. Según informó el Gobierno, con ello "se busca eliminar los retos existentes en materia de cobertura de vacantes de conductores cualificados para trabajar en el sector, tal y como habían solicitado representantes de las empresas españolas dedicadas al transporte por carretera, tanto de pasajeros como de mercancías".

Antes de este acuerdo más general, una de estas grandes empresas de transporte de pasajeros por carretera, Alsa, ya ha venido haciendo transferencia de trabajadores entre España y Marruecos, donde es la principal operadora. Precisamente, este lunes será el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, quien viajará a este país y una de sus paradas será la sede de Alsa en Casablanca, para conocer la actividad de la empresa en esta región y mantener un encuentro con los trabajadores. En su viaje de dos días a Marruecos, Puente también se reunirá con sus homólogos, los ministros de Transportes y Logística, Mohamed Abdeljalil, y de Infraestructura y Agua, Nizar Baraka. Uno de los puntos fuertes de la agenda es conocer los proyectos ferroviarios que tiene Marruecos, para crear una red de cercanías y de alta velocidad, ámbitos en los que empresas españolas tienen experiencia y gran capacidad técnica.

Además del tren, el transporte por carretera, de mercancías y de pasajeros, ha estado desde hace tiempo en las conversaciones del Gobierno y de las patronales con Marruecos, el país al que se ve como una fuente de trabajadores para un sector que ve cómo es cada vez más difícil abastecer las flotas. El sindicato FeSMC-UGT calcula que gracias al acuerdo de convalidación de permisos de conducir podrán venir unos 6.000 conductores desde Marruecos, para trabajar con sueldos españoles, aunque de momento con la incertidumbre de si podrán trabajar en otros países de la UE, dadas las disparidades que existen entre unos y otros sobre los carnets de conducir.

Por otra parte, patronales del transporte de mercancías y de pasajeros hace tiempo que exploran con el Ministerio de Transportes la posibilidad de cerrar acuerdos del estilo de Marruecos con países de América Latina, donde se da la ventaja adicional de que no exista barrera del lenguaje. "Desde el sector y la propia Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) lo hemos hablado con la Administración hace tiempo, también a nivel de la UE, buscando distintas alternativas viables para poder atraer gente nueva al sector. Una de ellas es traer conductores de otros países, tanto de Marrueco como de Hispanoamérica, fundamentalmente por el idioma", explica su secretario general, José María Quijano, que subraya que acuerdos como los de Marruecos no suponen abrir las puertas así como así. Los conductores que vengan de otros países deben haber hecho el curso de 180 horas para tener el Certificado de Aptitud Profesional (CAP) y un contrato de trabajo.

La necesidad de mano de obra ha llegado al punto de que algunas empresas han explorado por su cuenta y riesgo incluso crear en países de América Latina escuelas de formación de conductores, con el objetivo después de traerlos a España para trabajar, apunta el secretario sectorial federal de la FeSMC-UGT, Diego Buenestado. 

Como las empresas del sector del transporte, los sindicatos no ven problemas en que vengan trabajadores de otros países a suplir la falta de mano de obra que se da en España y en otros países europeos y exigen, eso sí, que se les garanticen las mismas condiciones laborales en un ámbito laboral que, a diferencia de las empresas, reclaman el derecho a la jubilación anticipada. FeSMC-UGT reclama la jubilación anticipada "de manera inmediata" por una cuestión también de "seguridad" y apunta a que los dos últimos accidentes más graves de autocar -el de Pontevedra en la Nochebuena de 2023 y, un mes antes, en los Lagos de Cogadonga- se produjeron en vehículos que iban conducidos por sendas personas de 63 años. "No es de recibo que en una exclusión de jubilados Andorra el mayor sea el conductor del autobús", apuntaba recientemente Buenestado en una jornada organizada por Confebús en el Congreso sobre la Ley de Movilidad Sostenible. Además de para defender las condiciones laborales en un sector que, dijo, están "por encima de la media", el presidente de esta patronal que agrupa a las principales empresas del sector, Rafael Barbadillo, fue muy tajante en contra de la alusión que el representantes de FeSMC-UGT hizo a la seguridad. "Somos un sector muy seguro, no puedo aceptar que que quede dicho, que probablemente hay que mejorar las condiciones laborales, pero no es un sector no seguro", aseveró.

De mercancías a pasajeros

Como ocurre en buena parte de la UE, el sector del transporte, tanto de mercancías como de pasajeros, adolece de falta de relevo generacional en España. La media de edad en este sector es elevada, supera los 51 años, y esto lleva a que ya hace falta integrar a "gente nueva", dice Quijano, con el problema de que no hay profesionales dispuestos a ello. Además, la presencia de la mujer es prácticamente inexistente o, como mucho, casi testimonial. En el transporte de mercancías no llegan al 1% y en el viajeros, tanto urbano como interurbano, oscila entre el 10 y el 15%.

Esto se une a que dentro mismo de la actividad del transporte por carretera se está produciendo un trasvase laboral en el que la profesión de camionero queda en la peor situación. La perspectiva de pasar semanas fuera de casa conduciendo un camión por distintos países ya no es atractiva para los jóvenes, que a ojos de Buenestado, tampoco tienen ya aliciente económico que llevó a sus padres a coger un camión. En esta situación, conducir un autocar de pasajeros parece una actividad menos desagradecida para los cada vez menos que se adentran en el mundo del transporte por carretera, donde la primera posición entre las preferencias pasa a ser el transporte urbano, los autobuses municipales. "Es más fácil adaptar la vida familiar. Un conductor municipal se va a casa y al siguiente vuelve. El trasporte de larga distancia es pesado y conlleva estar más tiempo fuera de casa, sobre todo cuando se hace internacional", explica Quijano.

La falta de transportistas es "un problema no sólo de España, es a nivel mundial", explica el secretario general de la CETM, por la "falta de relevo generacional". Aunque en buena medida el transporte de pasajeros se beneficia del trasvase desde el transporte de mercancías, la falta de profesionales en este ámbito también es una realidad. Así lo constataba hace unos días el presidente de Confebús. "Hay un cuello de botella regulatorio, con edades de acceso a la profesión tardías, orientación económica para acceder al CAP y al carnet de conducir", afirmó Barbadillo, que rechaza otro de los motivos que esgrimen los sindicatos para la falta de profesionales, que en la falta de conductores también tiene que ver con los sueldos. "Están por encima de la media, aunque tenemos que mejorar, seguramente", afirmó

En este escenario, ir a buscar trabajadores a otros países es una de las alternativas que empresas y administraciones tienen en mente para intentar que trabajadores jóvenes quieran subirse a bordo de un camión o un autocar, como facilitar que puedan sacarse el carnet de conducir y de capacitación específica. La CETM apunta también a una solución que ya se está poniendo en práctica en países europeos como el Reino Unido y también en España, en algunas comunidades como Castilla y León, que consiste en una política de financiación y de subvenciones para permitir a los jóvenes obtener su licencia de conducir profesional y puedan acceder a puestos de trabajo, como una forma de incentivarlo, no solo entre jóvenes, también entre mujeres.

Batería de contenedores quemados en Badalona: 10 en una noche

 Metropoli



El fuego, que se ha provocado en los barrios de Sant Roc, Llefià y La Salut, ha afectado también a tres vehículos

Madrugada en llamas en Badalona. Una vez más, varios contenedores han ardido este domingo entre las 00:00 y las 04:00 horas.

Tal y como ha informado el TOT Badalona, un total de 10 contenedores han sido consumidos por las llamas.

Tres coches afectados

En concreto, cuatro de ellos han ardido en la avenida Marquès de Sant Mori. Dos más lo han hecho en la calle de l'Àsia, otros dos en la calle Quevedo con Bernat Metge y un par más en la avenida del Maresme.

Por si fuera poco, los incendios han afectado a dos coches en la calle de l'Àsia y a uno más en la avenida del Maresme

Una oleada que se ha producido en la zona sur de Badalona, en los barrios de Sant RocLlefià y La Salut.





domingo, 3 de marzo de 2024

Atacan con un arma blanca a un pasajero del metro de Barcelona para robarle el móvil

 cronicaglobal


Imagen de un andén del Metro de Barcelona

Imagen de un andén del Metro de Barcelona Cedida

El usuario, que ha sido trasladado a un CAP, presentaba cortes superficiales en la cabeza y las manos

Nueva agresión durante la mañana de este domingo en el Metro de Barcelona. Según ha podido saber Crónica Global, los hechos se produjeron sobre las siete y cuarto, cuando dos sujetos atacaron a un pasajero para robarle el móvil

Según ha podido saber este medio de fuentes conocedoras del caso, el usuario se encontraba en la estación de Jaume I, en la línea 4 de Metro, cuando fue sorprendido por dos sujetos que se abalanzaron sobre él con un arma blanca. La víctima recibió golpes y un corte en la cabeza. “También presentaba una incisión en una mano porque se cubrió el rostro con los brazos”, sostiene un testigo. 

Ocho vigilantes para 22 estaciones

A esas horas en la L4 había cuatro parejas de vigilantes de seguridad para controlar un total de 22 estaciones. Los trabajadores de seguridad privada estaban distribuidos en las estaciones de Trinitat Nova, donde realizaban un operativo antigraffiti, Ciutadella, Joanic y Bogatell.

Los vigilantes acudieron alertados por los pasajeros del metro, que al ver la agresión apretaron “el botón del pánico” que hay en el interior de los convoyes. Fue el personal de seguridad quien avisó a los Mossos d’Esquadra desde el centro de control. 

Los agresores, huidos

Cuando los vigilantes llegaron al lugar de la agresión los agentes de la policía catalana estaban en el vestíbulo auxiliando a la víctima, pero los agresores ya habían huido.

Fuentes policiales han confirmado que la víctima sufrió cortes superficiales que no revestían gravedad al intentar defenderse. De hecho, la patrulla anuló el servicio de ambulancia y los propios policías trasladaron al afectado hasta un Centro de Atención Primaria (CAP) cercano. 

Solicitan más efectivos

Sergio Sánchez, portavoz de ADN Sindical Seguridad y Servicios de Cataluña denuncia la falta de efectivos de seguridad privada en el transporte público. “Ocho vigilantes son insuficientes para esa línea, que cubre zonas como plaza Urquinaona, la Vila Olímpica o Joanic, en las que hay locales de ocio nocturno”, sentencia. 

Además, también tienen que realizar operativos contra los grafiteros. “No damos abasto entre hurtos, robos, las personas que regresan de los locales de ocio nocturno y el vandalismo, teniendo en cuenta que nos encontramos con gente cada vez más violenta”, sentencia.

Muere un hombre de 35 años tras ser agredido en la rambla de Ponent de Tarragona

 20Minutos


Un Mosso d'Esquadra en la zona donde se ha producido la agresión a un hombre de 35 años en Tarragona.

Un hombre de 35 años ha muerto tras ser agredido minutos antes de las doce del mediodía de este domingo en la rambla de Ponent de Tarragona, han informado fuentes próximas al caso, pero de momento no se ha practicado ninguna detención.

Los servicios de emergencias han sido alertados de este caso, acaecido entre los barrios de Torreforta y Bonavista, a las 11.57 horas y hasta el lugar de la agresión se han desplazado varias unidades del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), que no han podido hacer nada por salvar la vida del hombre.

Los Mossos, según han explicado fuentes de este cuerpo, han establecido un dispositivo en la zona para tratar de determinar si la víctima ha sido agredida con un arma blanca o de fuego, saber si la autoría corresponde a una o varias personas y conocer las causas del homicidio.

Las 'kellys' piden poder prejubilarse sin penalización, como policías o bomberos: "Me he dejado mi vida en este trabajo"

 20Minutos


fotografo: Jorge Paris Hernandez [[[PREVISIONES 20M]]] tema: Testimonio Kelly. Crisolita. Enfermedad laboral. Jubilación
Crisolita Santos sufre dolores crónicos desde 2017 tras una mala operación del manguito rotador, una lesión habitual en las camareras de piso.

Las que la conocen desde hace años han sido testigos de cómo Crisolita Santos, de 54 años, ha ido cambiando su forma de caminar, de hablar y hasta de mirar. En las dos últimas décadas esta caboverdiana se ha dedicado a limpiar habitaciones, levantar pesados colchones y poner sábanas. Es una camarera de piso, una "kelly", y su cuerpo, que ahora se mantiene rígido, sin poder reclinarse a riesgo de sufrir un mareo, con cuatro hernias y una cirugía mal curada en el hombro, es el mayor testigo de todos estos años de duro trabajo.

"Yo era una persona viva, como decían las chicas que trabajaban conmigo, me iba a comer el hotel, y fijaos por donde que el hotel me ha comido a mí", declara Santos, que actualmente está de baja desde el pasado mes de septiembre por una dolencia en las cervicales y está a la espera de un análisis de la Seguridad Social que determine si recibe una pensión por incapacidad que le permita dejar de trabajar. "Yo he dejado mi vida en ese trabajo, lo poco que estoy pidiendo es que nos den un jubilación antes de que vaya a morir".

Las Kellys, una agrupación nacional de camareras de piso que toma su nombre del apócope de "las que limpian", ha reivindicado desde la semana pasada que estas trabajadoras -la práctica totalidad son mujeres- puedan optar a una prejubilación a los 58 años. Argumentan que apenas un 5% llegan a jubilarse achacadas por enfermedades, casi nunca reconocidas como profesionales, que las llevan a acabar recibiendo una incapacidad que suele conllevar una pensión menor a la jubilación y cuyo proceso de concesión genera estrés y ansiedad en las potenciales pensionistas.

Esta petición de Las Kellys llegó después de que se conociera que el Gobierno, los sindicatos mayoritarios (CCOO y UGT) y la patronal CEOE negocian un nuevo sistema para designar qué colectivos laborales pueden acceder a las jubilaciones anticipadas sin penalización en la pensión. Entre los criterios para decidirlo se habla del número de enfermedades profesionales o con las tasas de siniestralidad, medidores que podrían volver a dejar fuera a este colectivo compuesto en gran medida por mujeres extranjeras rara vez afiliadas a sindicatos.

"Nos sentimos personas de segunda un poco desplazadas, abandonadas, ninguneadas directamente", se lamenta, sentada en una cafetería junto a Crisolita, Anna Latka, también camarera de piso y portavoz de Las Kellys Madrid, la sucursal en la capital de la asociación que hizo público un comunicado la semana pasada reclamando su derecho a la prejubilación. "Queremos que nos vean, que nos reconozcan. Y que tengan en cuenta el trabajo y el esfuerzo que hacemos".

"Cada vez más dolor"

Crosolita Santos llegó a España cuando tenía 19 años. Trabajó como empleada del hogar hasta que, con 34 años, le contrató un hotel como camarera de piso. En 2017, con 47 años, le operaron por una lesión del manguito rotador del hombro, una típica lesión entre las camareras de piso, que no salió bien y, en sus palabras, la dejó "hecha un Cristo".

Desde esa fecha, las dolencias han ido multiplicándose por distintas partes del cuerpo. "Tengo dolores crónicos y tomo cuatro pastillas diarias y ahí voy: trabajo. me dan de baja unos meses y me vuelven a mandar al trabajo, pastilla, pastilla, más pastilla, rehabilitación, pastilla, más pastilla, rehabilitación… nunca va mejor, voy a peor, con cada vez más dolor".

fotografo: Jorge Paris Hernandez [[[PREVISIONES 20M]]] tema: Testimonio Kelly. Crisolita. Enfermedad laboral. Jubilación
Crisolita Santos está a la espera de la calificación de incapacidad para poder dejar de trabajar a sus 54 años.

Cada mañana, cuando se despierta, su marido se ha ido a trabajar y su hija pequeña, la última de los cuatro vástagos que sigue bajo su techo, se ha marchado al instituto. Al abrir los ojos se queda en la cama tumbada, mirando al techo, durante 10 minutos. Son las indicaciones que le ha dado su médico para poder levantarse sin riesgo de sufrir un mareo.

El resto del día, lo pasa sentada, sin poder agacharse o mirar hacia abajo. Y está siempre sola. "Varias veces me he mareado al subir las escaleras y me han tenido que ayudar los vecinos, así que paso más tiempo en casa que en la calle". Por la noche, su marido se va a dormir y ella se queda en el sofá hasta que las pastillas le hacen efecto para poder conciliar el sueño.

La de Santos es, según asegura, una situación habitual entre sus compañeras de trabajo. De las cinco que componían la plantilla de su hotel hace unos meses, una ya recibe la pensión y otra está de baja a la espera de la declaración de incapacidad. Otra, con una hernia en la espalda, sigue trabajando tomando analgésicos para el dolor.

"La gente no es consciente de que es un trabajo muy físico, solamente entran en un hotel y ven la habitación bonita"

"La gente no es consciente de que es un trabajo muy físico, solamente entran en un hotel y ven la habitación bonita, una cama preciosa, todo limpito, pero hay que hacer mucho esfuerzo, hay que meter el duvet en la funda, que es lo que fastidia el manguito rotador, hay muchos hoteles que tienen las camas muy bajitas, tienes que agacharte, levantar el colchón…", explica Latka, portavoz de Las Kellys. "Yo conozco una camarera de piso que se ha jubilado con su edad, ¡una!".

Negociación abierta sobre la prejubilación

Desde 2011, cuando se fijó la edad de jubilación en 67 años -que se están aplicando paulatinamente hasta 2027-, la ley de Seguridad Social reconoce a ocho colectivos laborales la posibilidad de jubilarse antes que el resto de los trabajadores manteniendo su pensión íntegra: mineros, personal de vuelo de trabajadores aéreos; trabajadores ferroviarios; artistas; profesionales taurinos; bomberos y policías.

Lo que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dirigido por la socialista Elma Saiz, está negociando en las últimas semanas con la patronal y los sindicatos es cómo se determinarán los nuevos colectivos que podrán prejubilarse sin penalización, igual que los ya mencionados.

Las negociaciones están abiertas y, por tanto, ni el Ministerio ni los sindicatos se atreven a decir si las camareras de piso podrían acabar o no viéndose beneficiadas por la medida. Fuentes de Seguridad Social señalan que los criterios que se tendrán en cuenta para esta actualización del reglamento serán tales como "la incidencia, persistencia y duración de los procesos de baja laboral, así como las incapacidades permanentes o fallecimientos que se puedan causar".

El sindicato UGT, por su parte, considera que estos indicadores están centrados en la peligrosidad y toxicidad, lo que dejaría fuera a profesiones muy feminizadas sin estas características como los cuidados o las propias camareras de piso. 

"El trabajo de las camareras de piso ni es tóxico ni es peligroso, pero el ejercicio y la carga reiterativos sí que producen un desgaste físico que es asimilable a la peligrosidad o la toxicidad"

"El trabajo de las camareras de piso ni es tóxico ni es peligroso, pero el ejercicio y la carga reiterativos sí que producen un desgaste físico que es asimilable a la peligrosidad o la toxicidad", argumenta Cristina Estévez, responsable de Seguridad Social de UGT. "Ya hay jurisprudencia y hay estudios del Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo que abogan porque existen indicadores objetivos de penosidad y nosotros nos hemos negado a avanzar si eso no se reconoce, no vamos a firmar, porque si firmamos solo indicadores de peligrosidad y toxicidad, quedarían fuera todas las profesiones feminizadas".

Por otro lado, las federaciones sectoriales de hostelería y turismo tanto de UGT y como de CCOO se reunieron este martes con las patronales del turismo precisamente para impulsar la jubilación anticipada de las camareras de piso.

Crisolita Santos no puede plantearse volver a trabajar, pero su situación actual es también insostenible. Lleva sin poder viajar a su país a visitar a su madre desde 2022 por llevar desde entonces encadenando bajar que no le permiten viajar al extranjero. La espera de la incapacidad, además, le está afectando anímicamente lo que también están sufriendo, según lamenta, los miembros de su familia.

"Somos un montón de compañeras a las que no nos dan la incapacidad permanente", declara la kelly. "Solo pedimos que, lo que nos quede de vida podamos vivir un poco dignamente, solamente eso".

Roban la puerta de aluminio de un edificio de Sant Adrià de Besòs

 Metropoli


Hueco del edificio donde han robado la puerta en Sant Adrià

Hueco del edificio donde han robado la puerta en Sant Adrià METRÓPOLI

Una comunidad de vecinos del paseo de la Rambleta se ha despertado este sábado sin el elemento de acceso al bloque de viviendas

Importante robo en Sant Adrià de Besòs. Un grupo de ladrones ha sustraído la puerta de acceso a un bloque de viviendas del paseo de la Rambleta, dejando el portal al descubierto.

El suceso ha tenido lugar la noche de este viernes y los vecinos lo han descubierto cuando se han despertado este sábado, 2 de marzo.

Puerta de aluminio

La puerta que los delincuentes han quitado de sus bisagras está hecha de aluminio. Un material que normalmente despiezan y venden en puntos limpios.

Según ha podido saber Metrópoli, los autores del robo también habrían accedido al interior de la sala de contadores.

Hace un par de años ya se dio una oleada de robos de puertas de aluminio en el barrio de Sant Joan Baptista, concretamente en la avenida de la Platja. En aquella ocasión, fueron varios edificios los que amanecieron sin el elemento de acceso, que tenía que costear la comunidad de vecinos.

Máxima presión contra la narcosala de La Mina: "Hay un descontrol absoluto, ni se esconden"

Metropoli


La narcosala ubicada enfrente del número 45 de Manuel Fernández Márquez, en La Mina

La narcosala ubicada enfrente del número 45 de Manuel Fernández Márquez, en La Mina METRÓPOLI

La familia de Kiko, el vecino que falleció el pasado 17 de febrero de una caída en su edificio, no se rinde y lucha para que se traslade fuera del barrio la sala de venopunción

Convivir con una sala de venopunción para toxicómanos en la acera de enfrente no es fácil. Todavía lo es menos cuando uno de tus familiares ha fallecido hace pocas semanas por esta problemática. Kiko fue una víctima directa de las peleas e invasiones a su comunidad de vecinos que protagonizan, día sí y día también, los adictos del barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs.

Ya han pasado dos semanas tras el infarto que le arrebató la vida a este vecino de 54 años al que todo el mundo quería. Sus vecinos y familiares lo describen como alguien muy "apañado", un "manitas" que igual te arreglaba un coche como cualquier desperfecto de casa. Ahora, su hermano y su sobrino, que todavía están acostumbrándose a la ausencia de Kiko, piden justicia y quieren reactivar las protestas que hace años concentraron a decenas de personas para pedir el traslado de la narcosala fuera del barrio.

Exterior de la sala de venopunción de La Mina

Exterior de la sala de venopunción de La Mina METRÓPOLI

La trama de la vigilancia de pisos

El hermano de Kiko tiene ganas de honrar la memoria de su hermano. En uno de los bancos de la soleada plaza del CAP de La Mina explica a Metrópoli sus recuerdos: "Nosotros vivíamos en lo que ahora es La Mina vieja, pero nos mudamos a estos bloques hace unos 10 o 12 años". Son las viviendas situadas en la avenida de Manuel Fernández Márquez, concretamente las del número 45. Al principio, la tranquilidad imperaba en la comunidad: "Éramos cuatro gatos y la mayoría estábamos en los pisos superiores, en la quinta planta". Sin embargo, todo comenzó a cambiar con la llegada de okupas y con la apertura de la narcosala.

A pesar de que el perfil de okupas que habitan en el edificio no es violento ni causa grandes problemas, el pariente de Kiko recuerda las consecuencias de la trama que este mismo año ha acaparado titulares por la confirmación de la inhabilitación a un exconcejal del PSC de Sant Adrià: "El día que se destapó todo lo de la vigilancia de los pisos, no pudimos dormir". Esa misma noche se abrieron multitud de casas "de patada", incluidas las del bloque de Kiko: "Se escuchaban golpes por todas las calles. Aquí ya se empezó a meter gente y la cosa cambió". Un negocio irregular que se desarrolló entre el 2012 y el 2016.

Una narcosala por sorpresa

Precisamente en esos años, los vecinos también fueron testigos de la instalación de la narcosala en la misma calle. "Antes había una provisional detrás de la biblioteca, junto a la comisaría de los Mossos d'Esquadra", recuerda el hermano de Kiko, 10 años menor que él. Un servicio que nadie del gobierno municipal de aquel entonces, también socialista, anunció a los más afectados por su presencia.

Los residentes del bloque ya lo contaron a este medio hace semanas, cuando el fallecimiento de Kiko todavía era muy reciente. Desde visitas inesperadas a medianoche de los toxicómanos que accedían a la escalera hasta la aparición de jeringuillas y "mierda" por todo el portal. El sobrino de Kiko, también presente en la conversación, recuerda una anécdota de cuando su tío aún vivía: "Una tarde aparecieron tres búlgaros en el rellano. Unos tíos enormes. Habían cogido el ascensor para acceder a los pisos superiores. Encima, cómodos". Moradores en su gran mayoría del este de Europa que, ante las preguntas de los residentes que los detectaron, abandonaron el edificio sin dar problemas.

Jeringuillas y suciedad acumulada en este edificio de La Mina

Jeringuillas y suciedad acumulada en este edificio de La Mina METRÓPOLI

"Ponérselo difícil"

Pero estas encuentros son más que habituales. No lo serían tanto si la puerta de acceso al edificio tuviese las medidas de seguridad pertinentes. Un día después de la muerte de Kiko, el Pla de Besòs arregló la cerradura, que estaba rota. A los pocos días, volvieron a "petarla": "Me sabe mal que lo hicieran con tanta prisa cuando mi hermano ya estaba muerto", lamenta el afectado.

Kiko salió por la puerta de casa la madrugada del 17 de febrero para dirigirse a la sala de los contadores, en el terrado. "Lo vi salir y ya no volvió", recuerda su familiar. Lo hizo para "ponérselo difícil" a los drogadictos. Quiso quitar la luz del fluorescente del cuartito: "Si tienen que usar un mechero o la linterna del móvil para pincharse, ya los molestas", dice su sobrino. Lamentablemente, a Kiko le dio un infarto cuando estaba subido a la escalera y cayó fulminado.

Traslado de la sala

Tras la tragedia, los vecinos de Kiko solo tenían buenas palabras para él. Las mismas que sus familiares: "Siempre estaba dispuesto a ayudar a todo el mundo". Su personalidad, además, destacaba: "Nosotros éramos el hermano de Kiko o el sobrino de Kiko. Nos asociaban a él". Les unía, dicen entre risas, una cualidad: que era calvo como ellos. También muy sociable y extrovertido, "hacía amigos con facilidad". Siempre vigilante, cuidaba que sus conocidos y allegados no tuviesen ningún problema con nadie: "A veces decía que algún día engancharía a uno de esos que se cuelan en el bloque, aunque sabía que no era la solución".

Ahora, parece que el embrión de la lucha se gesta de nuevo en el barrio. "Queremos reactivar la petición vecinal de que trasladen de sitio esta narcosala". Son conscientes de que el equipamiento "tiene que ir en algún lado", pero no entienden cómo se puede mantener en La Mina: "Vienen de Barcelona, de zonas como Sant Antoni, hasta aquí porque también se vende. Lo tienen todo", asegura el sobrino de Kiko. "Ha vuelto la heroína y esto está cada vez peor". Ya ni se esconden, dicen ambos familiares: "Antes por lo menos se metían en algunos solares vallados y allí hacían sus cosas. Como cada vez quedan menos porque están construyendo pisos, no les queda otra que hacerlo en plena calle. Algunos te piden perdón cuando los ves, pero no tengo porqué salir con niños pequeños a la calle y que vean esto", se quejan.

Restos de suciedad en la escalera de este edificio de La Mina

Restos de suciedad en la escalera de este edificio de La Mina METRÓPOLI

Llamado vecinal

Los afectados intetan averiguar la manera de hacer ruido y de llegar al Ayuntamiento de Sant Adrià. "Que presionen a quien tengan que hacerlo", dicen. "Mi hermano y yo solíamos hablar de esto asomados en el balcón. Teníamos buenas vistas hasta que construyeron el nuevo CAP y esta sala". Una zona que suele estar frecuentada por los mismos grupos de toxicómanos que forman corrillos a las puertas de la sala, algunos por las mañanas, nerviosos por consumir su dosis diaria. Los tiempos han cambiado y estos vecinos auguran un descontrol absoluto del consumo de drogas en las calles del barrio.

Sin embargo, desde la Asociación de Vecinos de La Mina rompen una lanza a favor del equipamiento. Aseguran que en el último trimestre del 2023 se recogieron de la calle 29.000 jeringuillas menos que en el segundo trimestre del año. Aún así, las imágenes que los vecinos han hecho llegar a este medio en multitud de ocasiones sobre la acumulación de estos utensilios usados en diferentes solares del barrio preocupan a la ciudadanía. Por lo menos, a esa parte que la ha sufrido directamente.

sábado, 2 de marzo de 2024

Tiroteo en La Mina: un herido de bala en el pie

 Metropoli


Un edificio de viviendas en el barrio de La Mina, en Sant Adrià de Besòs

Un edificio de viviendas en el barrio de La Mina, en Sant Adrià de Besòs GALA ESPÍN Barcelona

El suceso, que los Mossos d'Esquadra investigan, ha ocurrido en la calle Venus de Sant Adrià de Besòs

Nuevo tiroteo en el barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs. Tal como ha podido saber Metrópoli en exclusiva, este viernes por la noche un hombre de 35 años se ha presentado en la comisaría de los Mossos d'Esquadra del municipio herido de una bala en el pie.

Según confirman fuentes policiales a este medio, el tiroteo ha ocurrido tras una trifulca en la calle Venus. Vecinos apuntan que sobre las 22:30 horas de la noche “se oyeron tres impactos de bala”.

Una bala en el pie

Por el momento, se desconocen las causas del tiroteo, que los Mossos d'Esquadra investigan. Según relatan a este digital, el herido, que no está facilitando información a la policía, se encontraba bajo los efectos de las drogas o el alcohol cuando se presentó en la comisaría pidiendo socorro a los agentes.

El hombre fue trasladado de inmediato al Hospital del Mar de Barcelona, donde se recupera de las heridas de bala.

Canal Curiosidades : **El Libro de los Muertos: Una Guía hacia la Vida Eterna**

    El “Libro de los Muertos” es una de las obras más emblemáticas de la literatura funeraria del antiguo Egipto, siendo un compendio de tex...