Canal Historia :
11 MUJERES ASESINADAS por SU ROPA | La HISTORIA REAL de las MODAS más LETALES
Hace un par de siglos las mujeres ponían en riesgo sus vidas por seguir las tendencias de la moda. Y muchas murieron debido a estas modas peligrosas: más de 3.000 mujeres perdieron la vida víctimas de sus vestidos, entre 1850 y 1860, ¡solo en Inglaterra! #moda #historia En este vídeo documental en español os cuento la historia real de diversas mujeres que perecieron a causa de la moda: desde la esposa del poeta Henry Wadsworth Longfellow hasta la bailarina romántica Emma Livry, pasando por dos medio hermanas de Oscar Wilde o la célebre coreógrafa Isadora Duncan. ¿De qué estaban hechos los vestidos de las damas de mediados del XIX? Principalmente de seda, algodón y tul. Tejidos muy ligeros y, por tanto, muy inflamables. Comparada con ellos, la lana, que usaban la mayoría de los hombres, era un tejido bastante seguro frente al fuego. Para empeorar las cosas, a lo largo de la primera mitad del siglo XIX se fue poniendo de moda que las faldas fueran cada vez más y más amplias, lo que obligaba a las damas a ponerse debajo de la falda más y más enaguas almidonadas a la vez. ¡Hasta seis llegaban a ponerse! Como aquello era muy pesado e incómodo, apareció la crinolina, un armazón metálico que se empleaba como sostén de la falda. En Europa, la puso de moda la aristócrata española Eugenia de Montijo, emperatriz consorte de los franceses por su matrimonio con Napoleón III. Pero no solo usaban crinolina las mujeres de la nobleza: el precio de su versión metálica, inventada en Estados Unidos en 1856, era tan barato que casi cualquiera podía comprarse una crinolina y parecerse a las grandes damas. De ahí que el invento se popularizara tanto. ¿Inconvenientes? Aparte de la evidente incomodidad de que tu espacio corporal tuviese un diámetro de más de dos metros, si alguien o algo tocaba parte de tu falda, el armazón hacía que la parte opuesta también se moviera. Y eso algo es muy peligroso en reuniones sociales y bailes, cuando llevas tejidos inflamables y hay muchas velas, candelabros, chimeneas y fumadores a tu alrededor. Literalmente, te estás jugando la vida a cada instante por seguir la moda. Pero no todas las prendas asesinas mataban mediante el fuego. Algunas eran más sibilinas, como aquellas tintadas con arsénico. Sí, la humanidad sabe desde hace milenios que el arsénico es extremadamente tóxico y muchas veces se ha empleado como veneno para cometer asesinatos, pero también es cierto que, usado como tinte, genera un bonito color verde muy intenso, y además es barato. En la Inglaterra victoriana, lo usaban para teñir de verde todo tipo de productos: desde cortinas a zapatos, guantes, papel pintado, velas o vestidos. Dos de los compuestos químicos más famosos por su letalidad fueron el verde de Scheele y el verde de París.
Raquel de la Morena
https://youtu.be/JDWbPj6IRuc
No hay comentarios:
Publicar un comentario