La agresividad de los jabalíes hacia las personas preocupa y mucho a los vecinos de los barrios de montaña. En los últimos meses han tenido varios conflictos con estos animales. Quizás el caso más flagrante es el de la María Belén, una vecina de 85 años de Vallvidrera, a quien un jabalí mordió en verano y necesitó un mes y medio de cuidados. La María Belén nunca había tenido miedo de los jabalíes. Tenía siempre la puerta abierta, las bestias entraban en el patio de su casa y a ella le era igual porque estaba acostumbrada. Pero desde agosto, la sensación al ver a estos animales ha cambiado totalmente. Iba a salir de casa y le cayó el bastón. Al recogerlo, un jabalí se le tiró encima y le mordió el brazo.

De eso hace ya cinco meses y desde entonces esta vecina de Vallvidrera casi no sale de casa por miedo a que la vuelvan a morir y, si lo hace, es acompañada. Asegura que la actitud de los jabalíes ahora es diferente y que su casa se ha convertido en una cárcel porque los jabalíes la rodean cada día: "Ahora tengo miedo, no salgo aunque me paguen porque no estoy dispuesta a que me vuelvan a morir", asegura.

La actitud de los jabalíes es más agresiva

Según explica Jaume Badia, biólogo de fauna salvaje de la Universidad de Barcelona, "antes los jabalíes nos identificaban más como una amenaza y ahora nos identifican más como una fuente de alimento". Y añade: "Al final no dejan de ser animales salvajes y, si interpretan que con una pequeña agresión pueden conseguir alimento, pues actuarán así".

Los jabalíes de Collserola han perdido el miedo a las personas

La mordedura de un jabalí no es un caso aislado

Según los vecinos, este caso no está aislado. LaAssociació de Veïns Mont d'Orsà de Vallvidrera cree que el problema principal que tienen ahora con los jabalíes es la agresividad que tienen estos animales desde hace unos meses: "Han cambiado su actitud, no se espantan y, al revés, atacan".

Unas declaraciones que van en la línea de José Cervera, un vecino que vive junto al pantanode Vallvidrera y que también explica que se siente amenazado : "Cuando bajé con el pan de aquí del horno de Vallvidrera me atacan y nadie hace caso. Yo estoy harto de decirlo y es una vergüenza, y dicen que no se puede cazar". El José hace referencia a las batidas de jabalíes, que en Barcelona están prohibidas. De hecho, él es cazador y participó hace pocos días en una batida en la parte del Parque de Collserola que pertenece a Sant Just Desvern.

¿Cómo reducir la presencia de jabalíes?

En las últimas semanas el Ayuntamiento de Barcelona ha instalado en Vallvidrera 26 papeleras con sombrero y anclaje para que no se puedan volcar. También han renovado los anclajes de los contenedores con el objetivo de dificultar el acceso a la comida de estos animales en zona urbana. Además, el consistorio hace campañas de concienciación para que los ciudadanos alimenten a estos mamíferos. En otros municipios que conforman el Parque Natural de Collserola se hacen batidas para reducir su población pero en el de Barcelona no están permitidas. Lo que sí se hacen son capturas puntuales.

Un grupo de jabalíes pasto muy cerca de la plaza de Vallvidrera

"Según se ha demostrado en varios estudios, lo más efectivo para reducir la población de jabalíes es la caza selectiva de individuos jóvenes. De hecho, la caza indiscriminada puede tener efectos negativos para la reducción" explica Badía. La caza, sin embargo, debe ir acompañada de campañas de concienciación ciudadana, medidas para impedir el acceso a la basura o a los cultivos y muy importante: "Continuar con la investigación, porque se está viendo que hay opciones anticonceptivas que hacen que los jabalíes se reproduzcan menos".