Cientos de personas a las puertas y en el interior de la estación, demoras de más de dos horas en la salida de al menos una docena de trenes y un convoy lleno de pasajeros atrapado en un túnel y sin aire acondicionado: nueve de ellos tuvieron que ser atendidos por golpes de calor. La estación de Chamartín, en Madrid, se ha convertido en foco de polémica durante este verano por ser epicentro de averías varias y retrasos habituales.  

El epicentro de la Alta Velocidad en Madrid volvía a sufrir este lunes una jornada en la que los pasajeros de un tren llegaron a romper las ventanas del mismo para poder respirar. Fue ese convoy, un AVLO Valencia-Madrid, el que produjo la incidencia que tuvo a cientos de usuarios a la espera de poder comenzar su viaje y a sus propios pasajeros atrapados a 40 grados dentro del túnel que une Chamartín y Atocha. 

En varios vídeos e imágenes compartidos en redes sociales, se pone de manifiesto lo que viene ocurriendo desde hace varias semanas, donde los problemas son constantes. Algo que el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha achacado a la poca capacidad del complejo ferroviario, en plenas obras de ampliación.