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Las obras de prolongación de la L8 cerrarán al tráfico, a partir de este lunes y durante aproximadamente 12 meses, un tramo de la calle Comte d'Urgell en Barcelona. Los trabajos para conectar la línea del Vallès con la de Llobregat-Anoia de los Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) obligarán a cortar esta vía en sentido montaña, entre las calles Roselló y Còrsega.
Según ha explicado este domingo el Govern, la afectación responde a la construcción del recinto del pozo de la futura estación de Hospital Clínic. Las actuaciones contemplan la ejecución de pantallas de gran profundidad, de más de 80 metros, y el uso de máquinas pesadas que hacen necesario ocupar un amplio espacio en la superficie, además de colocar protecciones acústicas perimetrales de 3 metros de altura y otros de 6 metros alrededor de la zona de las obras.
Para ofrecer un itinerario alternativo al cierre, se cambiará de sentido la calle Rosselló entre Urgell y Calàbria, de forma que todo el tráfico que suba desde Urgell girará a la izquierda hacia Rosselló, para seguir el itinerario por las calles Calàbria, Londres, Gelabert y Entença hasta llegar a la avenida Diagonal.
En cuanto a las líneas de autobús, el consistorio barcelonés y la Generalitat recomiendan a los usuarios que "se informen de las modificaciones de las paradas", ya que habrá desvíos de líneas e itinerarios alternativos.
Por otra parte, las obras de la L8 generarán nuevas afectaciones a partir del 23 de febrero en otro punto de la calle del Compte d'Urgell, en el tramo entre la plaza Francesc Macià y la calle de Buenos Aires, para ejecutar el pozo de la futura estación de Francesc Macià.
Las obras superaran el límite de ruido
En octubre, la Generalitat avisó que estas afectaciones que comienzan este lunes iban a estar en el límite de la normativa de ruido y que la iban a superar en momentos puntuales. La Conselleria de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica se reunió con los vecinos de la zona para explicarles como iba a ser cuando esté trabajando la maquinaria pesada para hacer los pozos.
Otras afectaciones de los trabajos para la prolongación
En Plaça Espanya comenzaron las obras para la ejecución de pantallas perimetrales, utilizando maquinaria de grandes dimensiones, la pasada semana. Estos trabajos, que se extenderán hasta marzo, han obligado a reducir los carriles de seis a un mínimo de cuatro y a trasladar la parada de autobús situada en la Gran Via de les Corts Catalanes. Precisamente, en esta avenida se prevén también cortes puntuales hasta el 12 de febrero en el lado mar y del 12 de febrero al 5 de marzo en el lado Fira.
En la Plaza de Gal·la Placídia, se ha ocupado totalmente la acera del lado Besòs de la Via Augusta, entre Travessera de Gràcia y Oreneta, para los trabajos de la remodelación de la estación de Gràcia. Por ello, se desplazó el paso de peatones y la parada de bus, se reubicó el aparcabicis y se cerró provisionalmente el parque infantil. Esto generó malestar entre los vecinos del barrio barcelonés.
En la calle de Muntaner, hay afectaciones por trabajos previos de implantación y desvío de servicios para la construcción de una salida de emergencia del futuro túnel, en el tramo entre Laforja y Porvenir. Hasta el 21 de marzo, se ha ocupado el carril del lado Besòs, así como parcialmente la acera.
Con la ampliación de la L8, habrá tres nuevas estaciones de FGC en Barcelona: Hospital Clínic (intercambio con la L5), Francesc Macià (intercambio con el tranvía) y Gràcia. Además, se remodelarán las estaciones actuales de Plaça Espanya y Gràcia. Para alagar la línea, se está construyendo un túnel de cuatro kilómetros, mediante tuneladora en la mayor parte del trazado. La inversión total en la prolongación de la L8 es de 412 millones de euros y se prevé que suponga 19,5 millones de usuarios nuevos al servicio.
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