El ministro alemán de Interior, Horst Seehofer, atribuyó las devastadoras inundaciones en el oeste del país a la crisis climática y pidió acelerar las medidas para hacerle frente.

"Nadie puede dudar que esta catástrofe está relacionada con la crisis climática", dijo Seehofer en declaraciones a la revista "Der Spiegel".

Seehofer anunció además ayudas del Gobierno federal para los afectados por las inundaciones

"Mi ministerio trabaja en ello actualmente con la cancillería y con el ministro de Finanzas, Olaf Scholz", dijo Seehofer.

Al menos 80 personas han muerto a consecuencia de las inundaciones y 1.300 personas continúan desaparecidas, según el último balance de las autoridades.

El número de desaparecidos es difícil de estimar con precisión ya que, según una portavoz del distrito de Ahrweiler, se ha producido un colapso de las líneas de telefonía móvil por lo que muchas personas no han podido ser contactadas.

Según la Oficina Federal para la Protección ante las catástrofes hay 23 ciudades afectadas por las inundaciones.

Cerca de 600 kilómetros de vías de ferrocarril han sido afectadas y 165.000 personas estuvieron temporalmente sin suministro de electricidad.