La subida de la presión asistencial, especialmente por el pico de las enfermedades de vías respiratorias como la gripe, deja esperas de "hasta catorce horas" a perfiles que deberían ser atendidos en una hora.

Pasillos llenos en las urgencias del Hospital del Mar. | Twitter (UrgenciasDelMar)
Hace días que los profesionales del Hospital del Mar exponen las cifras de la innegable
saturación que viven las urgencias del centro sanitario barcelonés. Con un tope de 93
pacientes, hace semanas que se han establecido cifras que doblan esta capacidad de
manera habitual y rozan las 200 personas esperando a ser atendido o ser subido a
planta. Esto ha disparado las esperas de los pacientes y ha estresado la atención. Y, ante ello, los sanitarios han
estallado públicamente, pero también internamente.
Según detallan diversas fuentes a Nación, hasta tres miembros del equipo médico de
Según detallan diversas fuentes a Nación, hasta tres miembros del equipo médico de
urgencias habrían amenazado con dimitir de golpe si no se garantizaba la calidad
asistencial. Además, la gestión del día a día no solo obliga a reducir significativamente
las cirujanas no urgentes o llenar los pasillos de camas con pacientes, también hay otras
muestras de la saturación: "Hay días que tenemos que llamar al SEM para pedir que
no nos lleve más pacientes, que intente ir a otro hospital", detalla una médica del
servicio de urgencias, en referencia a las ambulancias del Sistema de Emergencias
Médicas (SEM) que trasladan casos urgentes a los centros médicos.
La sensación entre los sanitarios que se encuentran en el ojo del huracán de las urgencias
es que hay un regocijo inacabable de ejemplos que evidencian la saturación que viven,
acentuada con el agotamiento personal de las guardias de 24 horas. Sin embargo, la
preocupación más repetida es la atención deficiente que algunos sanitarios consideran
que se está ofreciendo a los pacientes. Ya no por ser ingresados en planta -que en
algunos casos superan los cuatro días de espera- sino para recibir una visita médica y
comenzar el tratamiento en urgencias. "Lo más escandaloso es el tiempo que tardas
desde que llegas al hospital hasta que te visita el médico y te hace la primera asistencia,
las pruebas y el tratamiento que necesitas", detalla una de las coordinadoras del servicio
de urgencias, Rocío de Paz.
El sistema de triaje establece las prioridades en la atención según las condiciones del
El sistema de triaje establece las prioridades en la atención según las condiciones del
paciente y sitúa una horquilla temporal según la gravedad del paciente. El problema que
denuncian, sin embargo, es que la gente que deberían hacer esperar un máximo de
una hora por la condición que presenta está siendo visitada "hasta catorce horas
después de llegar a urgencias", añade la misma fuente sanitaria.
En invierno es habitual que el pico de las enfermedades respiratorias vierta tensión a las
urgencias, más aún ahora, con la coexistencia de la gripe y la permanencia de la covid-19
. Ahora bien, fuentes oficiales del propio hospital reconocen que este nuevo escenario
está dejando una postal inédita. Al margen de las oleadas de la pandemia, se está
llegando a "números de pacientes atendidos en urgencias que no habíamos visto nunca
de manera tan sostenida", apuntan portavoces del centro.
En este sentido, sitúan un incremento de la presión en urgencias de alrededor del
En este sentido, sitúan un incremento de la presión en urgencias de alrededor del
20% respecto al invierno del año pasado. También son personas, en muchos casos de
más de 70 y 80 años, que están requiriendo más ingresos en planta de lo habitual. Antes,
de los pacientes que llegaban a urgencias, poco más del 10% requería ingreso posterior.
Ahora, las cifras están orientadas entre el 15% y el 20%.
Igualmente, sobre las peticiones al SEM para que no traslade más pacientes a urgencias,
fuentes del hospital admiten que es una de las prácticas derivadas de la actual situación.
"Se trata de derivar pacientes para que no siga sobrecargándonos ante una presión
muy alta", exponen desde el centro sanitario, al tiempo que piden evitar la palabra
"colapso" porque quien llega acaba siendo atendido.
Los que no dudan en utilizar un lenguaje más contundente son los profesionales que se
Sanitarios que dicen bastante
Los que no dudan en utilizar un lenguaje más contundente son los profesionales que se hacen cargo de estas urgencias. Agotados, al menos una de las médicas que amenazó con
dimitir ya lo ha ejercido. El ritmo agotador y la herencia de la covid, aún sobre los
hombros de los sanitarios, han llevado a varios trabajadores a coger la baja o a
replantearse el futuro. "Yo ya he anunciado que este enero rescindo mi contrato",
explica de Paz. Tenía un contrato indefinido y un buen sueldo, explica, pero la situación
se le ha hecho insostenible.
"Cuando nos equivocamos, muere gente. Y yo no puedo tener esa sombra encima
"Cuando nos equivocamos, muere gente. Y yo no puedo tener esa sombra encima
constantemente cuando trabajo con la salud de las personas. Cuando cada día sufres,
te
planteas si tienes alguna otra opción. Y ahora hay trabajo en diferentes lugares, para
los médicos. Así que buscaré alternativas a cambio de paz mental", expone la sanitaria.
Como ella, otros compañeros han huido de urgencias en los últimos dos años o han
dejado de hacer guardias.
Hace meses que los diferentes perfiles sanitarios del hospital reclaman cambios. Más
Hace meses que los diferentes perfiles sanitarios del hospital reclaman cambios. Más
allá de saber que el problema no es exclusivo del Hospital del Mar, y que la gestión de
las urgencias provoca situaciones parecidas a otros centros sanitarios del país, los
trabajadores de este hospital han empujado especialmente, en el último año. El pasado
noviembre, de hecho, el equipo de urgencias envió un escrito a la gerencia y las
direcciones de medicina y enfermería. En él se expresaba decepción por promesas
incumplidas. "Curiosamente aumenta la cifra de pacientes, la complejidad y la
gravedad de los mismos, pero el personal sanitario y los recursos son los mismos",
protestaba la carta.
Desde el centro sanitario, al margen de haber habilitado camas de apoyo al Hospital de
La ampliación y poder incorporar más personal
Desde el centro sanitario, al margen de haber habilitado camas de apoyo al Hospital de la Esperanza, puntualizan que el gran cambio a la vista lo experimentarán cuando se
estrene la ampliación del Hospital del Mar, que doblará la superficie de urgencias y
aportará 75 nuevas camas de hospitalización. Igualmente, reconocen que uno de los
principales retos está siendo poder pescar nuevos profesionales. "Hay un problema
de contratación y no hay suficientes profesionales para cubrirlo todo", se explica desde
el centro, que pese a ello concretan que ya se ha tramitado la autorización para fichar
más personal de manera inminente.
Si bien las consecuencias más claras se ven en el Hospital del Mar, el resto de grandes
Si bien las consecuencias más claras se ven en el Hospital del Mar, el resto de grandes
equipamientos barceloneses están experimentando una situación con un fondo similar, si
bien los recursos son diferentes. Lo ejemplifica el caso del Hospital de Sant Pau.
"Tenemos una red de centros sociosanitarios que nos permite ubicar a las personas
mayores y estabilizar a los enfermos con pluripatologías sin comprometer la ocupación
de las camas del hospital o las urgencias", expresan fuentes del centro a este diario. Así,
constatan que hay un aumento de la demanda por la llegada de la gripe respecto a otros
años, especialmente ahora que ya no llevamos mascarilla de manera recurrente, pero se
niega la saturación de los servicios hospitalarios. En cuanto a los profesionales, sin
embargo, en el propio Hospital de Sant Pau se han tenido que hacer refuerzos.
Más allá del Mar
Ahora bien, ni el Sant Pau ni el Hospital de la Vall d'Hebron han llegado adesprogramar ninguna cirugía, resaltan fuentes oficiales de los dos centros. Mientras
que el Clínico no ha dado detalles de la situación de las urgencias, en la Vall d'Hebron
ubican el actual pico invernal en la normalidad. "Hay una afluencia importada de
pacientes, pero como cada invierno y se está funcionando de manera correcta",
resuelven portavoces del hospital.
Mientras tanto, y con la duda de si aparecerá un nuevo repunte de enfermedades
Mientras tanto, y con la duda de si aparecerá un nuevo repunte de enfermedades
respiratorias con la temporada de frío, quienes da un paso adelante son los sanitarios. El
próximo 25 y 26 de enero habrá dos jornadas de huelga unitarias, que concentrará
tanto la convocatoria inicial de Metges de Catalunya como la llamada de la Mesa
Sindical de Sanidad de Cataluña, que integra enfermería, auxiliares y el resto del
personal sanitario. Entre los principales motivos de esta movilización, la sobrecarga de
trabajo.