Vecinos de Pere IV se manifiestan de noche por los botellones : "Me tuve que tomar pastillas para dormir"
Hace años que arrastran quejas por la suciedad en el barrio y el incivismo: denuncian que se les hace imposible dormir las noches de miércoles a domingo
El ocio nocturno reabrió el 11 de febrero, sin límite de aforo ni pasaporte covid, y eso hacía pensar que las botelladas cesarían. En la calle de Pere IV, en Poblenou, lejos de menguar, se han agravado. Los vecinos de esta calle ya hace tiempo que denuncian no poder dormir y este viernes por la noche se han manifestado contra el ruido y el incivismo, y por "recuperar la dignidad del barrio".
El origen de todo ello es que en un pequeño radio, entre las calles de Pamplona y de Ávila, se concentran muchos locales de ocio nocturno y en las entradas y salidas los jóvenes hacen chivarri de madrugada, e incluso algunos vecinos, dicen, deben medicarse para poder dormir. A todo ello se suman varias escenas de incivismo de gente que orina en la calle, vomita o destroza mobiliario urbano.
Lo que más me preocupa es mi hija. El hecho de que no pueda dormir, se despierte y tenga miedo. La tuve que llevar a una habitación que no es la suya"
Un vecino dice que lo que más lo hace sufrir es la falta de descanso de su hija. De hecho, en verano algunos vecinos ya explicaron a betevé que han tenido que cambiar la distribución de las casas para poder dormir.
Otros explican que el perfil es gente muy joven que compra bebidas en supermercados o en los mismos bares de la zona, pero consumen en la calle. Piensan que a raíz de la pandemia ha habido un cambio en este sentido, y que las botelladas no marcharán. Piden más presencia policial, aunque este sábado por la madrugada han notado un aumento del patrullaje policial que ha dispersado varios grupos.
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