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La propuesta de reforma de la ordenanza de convivencia municipal incluye agravantes para aumentar las multas por orinar en la calle y castigar el exhibicionismo y la masturbación en público
(ACN) El Ayuntamiento de Barcelona plantea sancionar con hasta 3.000 euros las rutas alcohólicas y con hasta 1.500 euros los botellones que se hagan en zonas donde hay menores o que puedan incitar al consumo de alcohol los menores. Estas son algunas de las medidas que recoge la propuesta de reforma de la ordenanza de convivencia que el gobierno municipal ha presentado este viernes a los grupos del consistorio.
La reforma también introduce agravantes para orinar en la calle, por ejemplo que se haga en los alrededores de lavabos púbicos y de discotecas o restaurantes, así como en calles estrechas. Una de las novedades que se quiere introducir es castigar actos que atenten contra la libertad e indemnidad sexual, como el exhibicionismo o masturbación en público.
Beber alcohol en la calle, de los 600 a los 1.500 € de multa
En cuanto al consumo de bebidas alcohólicas en la calle, las multas propuestas llegan a los 600 euros cuando se perturba la tranquilidad ciudadana, es decir, cuando se perjudica el descanso vecinal, se hace en zonas donde se aplican medidas de reducción del ruido o se causan "molestias graves a los vecinos". Aquí, además, uno de los agravantes introducidos es cuando el botelón se hace en lugares donde hay menores o puede incitarlos al consumo de alcohol. En este supuesto, la multa se eleva a entre 750 euros y 1.500 euros.
En el caso de las rutas turísticas, las sanciones planteadas son de entre 1.500 y 3.000 euros. La intención es prohibir la publicidad, organización, venta y realización de estos itinerarios, pero también el traslado o retorno de las personas que participan.
Sanciones más caras para orinar en la calle
En cuanto a orinar en la calle, el gobierno municipal plantea introducir agravantes que aumenten las sanciones en algunos supuestos. Por ejemplo, se castigará con hasta 750 euros cuando se haga en los alrededores de aseos públicos o de libre acceso al público, de establecimientos de concurrencia pública, como musicales o de restauración, y a calles de una anchura de cuatro metros o inferior.
En el caso de las pintadas, el texto propone que las personas que las hagan en lugares no autorizados sean castigadas con hasta 600 euros y también penaliza que se promueva, favorezca o colabore con esta actividad. La propuesta plantea también que quien hace las pintadas deba asumir el coste de la limpieza o reparación del espacio dañado, sin perjuicio también de la imposición de la sanción correspondiente.
El exhibicionismo, la masturbación y los tocamientos, también castigados
El borrador que se ha presentado también introduce como novedad el castigo de actos que atentan contra la libertad e indemnidad sexual en el espacio público. Se castiga así el exhibicionismo y masturbación en el espacio público ante personas adultas, manifestaciones o expresiones verbales que puedan resultar degradantes o humillantes y que puedan ofender la dignidad de las personas a las que van destinadas. También se incluyen los tocamientos o rozamientos—también los simuladamente accidentales—, el seguimiento, mantenimiento de conductas o mensajes sexuales puntuales sin amenazas ni coacciones y la insistencia en tocar, abrazar o cualquier otra conducta que se considere que atenta contra la libertad e indemnidad sexual.
Menos descuentos por pagar anticipadamente
La propuesta del gobierno municipal también rebaja el descuento que se aplica si se paga de forma anticipada la multa, que pasaría del 65 % y el 70 % actual a ser de entre el 40 % y el 50 %. Otra de las cuestiones que quiere abordar la reforma de la ordenanza es que las sanciones aplicadas a extranjeros se paguen. Así, se pretende iniciar ya en el momento el proceso sancionador y que la denuncia del agente de la autoridad comporte ya el inicio de este proceso sancionador, según apunta el texto.
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