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Los vecinos de Torrevieja han sido testigos de un fenómeno poco común durante la mañana de este martes. La ciudad costera de la provincia de Alicante ha amanecido con calima y un extraño olor a quemado; pero el origen del incendio se encontraba a varios cientos de kilómetros. Concretamente, el fuego se encuentra declarado en el municipio de Paüls, en Tarragona, a más de 430 kilómetros de distancia.
Si bien desde la Concejalía de Emergencias de Torrevieja indican que no hay riesgo para la población en la zona, se recomiendan medidas como mantener puertas y ventanas cerradas, limitar la actividad al aire libre en caso de ser una persona sensible y seguir la información oficial de las autoridades. Los mapas de previsión de vientos indican que la situación regresará gradualmente a la normalidad durante el día.
Los fuertes vientos, que complicaron la labor de los bomberos para controlar el fuego, han movido con velocidad los restos de humo por todo el litoral mediterráneo. Los servicios del 1-1-2 de la Región de Murcia han registrado más de un centenar de llamadas por el fuerte olor a humo. "Realizadas las oportunas averiguaciones, parece que se trata de una lengua de humo que procede de un gran incendio forestal que tiene lugar en Paüls (Baix Ebre, Tarragona)", han precisado a través de la red social 'X'.
La Generalitat solicitó apoyo a la UME
Las autoridades de la localidad alicantina han afirmado que el humo y el olor han sido arrastrados por el viento de levante desde los grandes incendios forestales activos en la provincia catalana. El incendio ya se ha cobrado más de 2.300 hectáreas de masa forestal, empeorado por rechas de vientos que han alcanzado los 90 kilómetros por hora durante la noche del lunes a este martes.
La Generalitat ha solicitado durante la madrugada de este martes apoyo de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para hacer frente al incendio forestal.
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