Quejas por gritos y golpes en un piso acaban con un detenido por pertenencia a crimen organizado

La Guardia Urbana comprobó que uno de los inquilinos del piso en cuestión tenía una orden internacional de detención por tráfico de sustancias estupefacientes

Las quejas vecinales por los gritos y los golpes que venían del interior de un piso del Eixample, en la calle de Muntaner —día sí y día también— han acabado con un detenido por un requerimiento internacional de pertenencia a crimen organizado, según ha explicado la Guardia Urbana de Barcelona.

La policía local, que recibió el aviso de los vecinos a mediados del mes de enero, identificó a los inquilinos y comprobó que uno de ellos tenía una orden internacional por pertenencia a crimen organizado por tráfico de sustancias estupefacientes y, el 2 de febrero, lo detuvieron.

Intervenido, también, un cachorro de perro

Los agentes de la policía local también intervinieron un cachorro de perro, que, según dicen, se encontraba "en muy mal estado de salud". Siguiendo el protocolo en estos casos, la Oficina de Protección de los Animales de Barcelona (OPAB) se está haciendo cargo del animal. El informe de los veterinarios decantará la balanza hacia un lado o el otro en el sentido de si los propietarios deberán ser investigados por maltrato animal o no.