miércoles, 18 de junio de 2025

🏔️ Descubrimiento de un mundo perdido bajo la Antártida

 

La Antártida esconde mucho más que una extensión helada. Bajo kilómetros de hielo, una cadena montañosa de 500 millones de años intriga a los científicos.

Este descubrimiento arroja luz sobre la dinámica entre los relieves enterrados y los casquetes polares. Las montañas Transantárticas, de 3.500 km de longitud, desempeñan un papel clave en la circulación del hielo, influyendo en su espesor y flujo desde hace millones de años.

Una barrera natural bajo el hielo

Las montañas Transantárticas separan dos regiones geológicamente distintas. Al este, un cratón estable de mil millones de años contrasta con el oeste, marcado por un sistema de rift activo. Esta división moldea la evolución del continente.

Estos relieves han experimentado múltiples fases de erosión y levantamiento. Los investigadores han analizado muestras de rocas para reconstruir su historia, revelando ciclos repetidos de formación montañosa vinculados a movimientos tectónicos.

El estudio de minerales mediante termocronología ha permitido datar estos eventos. Los resultados sugieren una intensa actividad geológica, sincronizada con períodos de glaciación importantes hace unos 300 millones de años.

La influencia de las montañas en el hielo

Aunque ocultas, estas montañas guían los flujos glaciares como rieles invisibles. Sus cumbres y valles canalizan los glaciares, determinando su velocidad y acumulación. Esta interacción entre roca y hielo es esencial para comprender la evolución de los casquetes polares.

Los científicos han descubierto evidencias de una antigua cadena montañosa bajo la Antártida oriental. Anomalías gravimétricas y magnéticas sugieren que podría ser aún más antigua que las montañas Transantárticas, remontándose a una época en que la Tierra era radicalmente diferente.

Estos relieves enterrados ofrecen pistas sobre climas pasados. Árboles fosilizados, emergiendo del hielo en retroceso, dan testimonio de épocas en que la Antártida era más cálida, mucho antes de su glaciación actual.




Estos son los países que más material radiactivo han vertido frente a las costas españolas

 


este pasado domingo, 15 de junio, el Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS) de Francia –equivalente al CSIC en nuestro país– puso en marcha uno de los proyectos medioambientales más ambiciosos hasta la fecha. Entre 1956 y 1990, varios países europeos vertieron más de 220.000 barriles de residuos radiactivos en las aguas del océano Atlántico. Las consecuencias para el ecosistema marino podrían ser demoledoras, motivo por el que el centro de investigación francés se ha propuesto analizar estos residuos, situados –una gran parte– a 900 kilómetros al noroeste de Galicia.

Ante esta posible catástrofe ecológica, el país galo puso en marcha el proyecto NODSSUM, con el objetivo de medir el posible impacto medioambiental de los barriles. Más concretamente, el objetivo de la primera fase –que se prolongará hasta el 11 de julio– se centrará en cartografiar la principal zona de inmersión frente a las costas gallegas, de unos 6.000 kilómetros cuadrados. Esta campaña, en la que se combina física nuclear, biología y química marina, busca comprender el comportamiento de los radionucleidos en las profundidades del océano, así como su posible interacción con el ecosistema.

«El objetivo de nuestra misión es mapear y muestrear las zonas cercanas a estos residuos para entender el impacto que han tenido en este entorno», explicó el geólogo Javier Escartín al diario francés L'Express.

Dependiendo de los resultados de esta primera fase de la misión, está previsto que la segunda campaña movilice un robot operado remotamente o un submarino tripulado –el ROV Victor o el submarino Nautile– para realizar estudios y tomar muestras en las inmediaciones de los barriles.

    El proyecto francés tiene lugar décadas después de que una gran cantidad de países llevara a cabo una política ambiental totalmente desastrosa. La falta de alternativas de almacenamiento seguras propició que varias de las grandes potencias mundiales realizaran esta práctica, la cuál podría tener consecuencias irreparables para nuestros océanos.

    En el caso del Atlántico, seis países monopolizaron estos vertidos. Atendiendo al estudio a un estudio realizado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en 1999, Reino Unido (74.052 toneladas) fue la nación que mayor cantidad de material radiactivo descargó en las aguas del océano Atlántico entre 1949 y 1982. Junto a Bélgica (23.100 toneladas), Países Bajos (19.162) y Francia (14.299), estos países monopolizaron la gran mayoría de los vertidos.

    Tal como señala la investigación –titulada Inventario de los vertidos de residuos radiactivos en el mar–, a pesar de que no hay registros del peso total vertido por Estados Unidos, sí hay registros de los objetos (34.282) que yacen en el fondo del océano. Junto al país norteamericano, Bélgica (55.324 objetos) y Francia (46.396 objetos) fueron los países que más elementos vertieron sobre las aguas del Atlántico. Por su parte, la ya extinta Unión Soviética (URSS) y Japón priorizaron el vertido de material radiactivo en las aguas del océano Pacífico, dada su mayor cercanía con estos países.

    Ante la grave práctica desplegada en los principales meses de la Guerra Fría, se prevé que la iniciativa francesa arroje un poco de luz sobre el inmenso vertido radiactivo realizado a lo largo del siglo XX, cuyas consecuencias podrían seguir perdurando décadas después frente a las costas españolas.

    El increíble fenómeno visual que deja ver la Costa Brava desde Barcelona: solo durante dos días al año

     Metropoli


    Captura de las Torres Mapfre y la aguja de la Torre Calatrava vistas desde Tossa de Mar

    Desgranamos los factores que contribuyen a que se pueda ver la Costa Brava desde la misma ciudad de la capital catalana, un evento desconocido que se da en ocasiones especiales

    Algo más de 75 km separan una de las panorámicas más emblemáticas de la ciudad de Barcelona, del entorno histórico por excelencia del municipio de Tossa de Mar: hablamos de Montjuïc y la Vila Vella de Tossa.

    Dos puntos lejanos en línea recta y separados por una costa que serpentea conforme avanza hacia el norte hasta llegar al Cap d’Or o Mont Guardí de Tossa de Mar.

    Una distancia, sin embargo, que permite que se encuentren en una única instantánea en dos momentos al año, convirtiéndose, sin duda, en un acontecimiento inusual, a la vez que mágico y desconocido.

    Salida de sol con vistas a Tossa de Mar y la Costa Brava desde Montjuïc

    Salida de sol con vistas a Tossa de Mar y la Costa Brava desde Montjuïc Flickr Mark Bret

    Factores para un buen avistamiento

    Para que la Costa Brava, con el Cap d’Or de Tossa de Mar como estandarte visible, se revele desde Montjuïc, la atmósfera debe conseguir una serie de factores atmosféricos, meteorológicos y de visibilidad muy concretos.

    El fenómeno, como muchas de las fotografías a distancia, se debe a la refracción atmosférica, un efecto óptico que curva la luz al atravesar capas de aire de distinta densidad, como si el cielo se convirtiera en una lente que acerca lo lejano.

    Esto ocurre cuando una capa de aire cálido reposa sobre otra más fría, formando una inversión térmica, muchas veces favorecida por la temperatura del mediterráneo, actuando así, como un canal para la luz. Para que estas condiciones se den, una baja humedad ambiental es crucial, ya que el vapor de agua, fruto de la evaporación del mar, puede empañar la vista.

    Sin nubes bajas en el horizonte, especialmente en el amanecer, la silueta de Tossa puede perfilarse con nitidez unas dos veces al año, coincidiendo con fechas actuales.

    Silueta del Cap d’Or de Tossa de Mar desde Montjuïc

    Silueta del Cap d’Or de Tossa de Mar desde Montjuïc Flickr Mark Bret

    ¿Cuándo verlo?

    El encuentro visual entre Montjuïc y el Cap d’Or de Tossa de Mar no ocurre cualquier día. Hay dos momentos al año, aproximadamente 16 días antes y después del solsticio de verano (5 de junio y 7 de julio), cuando el sol sale justo por detrás del Promontori de Tossa.

    En esos instantes, el disco solar enmarca la silueta del Cap d’Or, con su faro y las murallas de la Vila Vella, creando una estampa que conecta la capital catalana con la Costa Brava.

    La alineación precisa del sol con el relieve costero, a 76 kilómetros de distancia, hace que el turó de Tossa destaque como una sombra dorada contra la luz del alba.

    Curiosamente, en los días cercanos al solsticio de invierno, la perspectiva se invierte: desde Tossa se puede vislumbrar Montjuïc y elementos concretos del perfil urbano de Barcelona en el momento contrario del día, a la puesta del sol.

    Captura de las Torres Mapfre y la aguja de la Torre Calatrava vistas desde Tossa de Mar

    Captura de las Torres Mapfre y la aguja de la Torre Calatrava vistas desde Tossa de Mar Flickr MarkBret

    Marc Bret

    En el corazón de este fenómeno está Marc Bret, un fotógrafo y paisajista catalán cuya pasión por los horizontes lejanos (expresión que ha dado título a su Blog “Horitzons llunyans”) ha convertido estos puntos de vista e instantáneas en un verdadero arte.

    Con su cámara y un conocimiento profundo de la meteorología, Bret ha capturado la silueta del Cap d’Or desde Montjuïc en múltiples ocasiones.

    No solo eso, sino que además, ha conseguido tener el récord Guinness desde 2016 a la fotografía terrestre a más distancia del mundo: más de 440 km de distancia que unieron los Pirineos y los Alpes en una sola imagen.

    El Mediterráneo se recalienta: impacto, causas y efectos de un mar cada vez más cálido

     

    El aumento inusual de la temperatura en el mar Mediterráneo está captando la atención de la comunidad científica y la sociedad en general. A pocos días del comienzo del verano, las mediciones muestran que muchas zonas de la cuenca mediterránea presentan valores térmicos propios de pleno agosto, cuando apenas ha comenzado junio. Este fenómeno, lejos de ser puntual, pone de manifiesto una tendencia preocupante que lleva años acentuándose.

    Las causas de este incremento térmico no se reducen a una única variable. Por un lado, la ausencia de vientos fríos, en especial la tramontana, ha impedido el afloramiento de aguas profundas más frescas. Por otro, la persistencia de anticiclones subtropicales ha favorecido cielos despejados y masas de aire cálido, incrementando la insolación sobre el mar. Además, venimos de un invierno y una primavera con temperaturas más altas de lo habitual, por lo que el mar ya partía de valores elevados antes siquiera de empezar la época estival.

    Temperaturas de récord y anomalías en toda la cuenca

    Según los últimos datos de observatorios costeros y boyas oficiales, la temperatura superficial del Mediterráneo occidental excede los valores normales en 3-4 ºC e incluso se alcanzan anomalías de hasta 5 ºC en algunas áreas del sur de Francia y el litoral italiano. En la Península, destacan las cifras registradas en la costa valenciana, el mar Balear y Baleares, donde se han alcanzado 28 ºC en Pollença, 26,99 ºC en Mahón y más de 25 ºC cerca de Valencia.

    En el resto del litoral, las aguas permanecen igualmente cálidas: entre 24 y 26 ºC en Tarragona y Comunidad Valenciana; 22-24 ºC en la costa catalana, Almería y Granada. Incluso en zonas tradicionalmente más frescas como el Golfo de León o el mar de Alborán, las temperaturas se sitúan muy por encima de lo habitual para estas fechas.

    Efectos inmediatos en el clima y la meteorología

    Las consecuencias del calentamiento del Mediterráneo se notan ya en la vida cotidiana. La mayor evaporación y el incremento del vapor de agua en la atmósfera están favoreciendo la proliferación de noches tropicales, esas madrugadas en las que el termómetro no baja de los 20 ºC. Además, la presencia de un mar sobrecalentado proporciona energía adicional a los sistemas meteorológicos, potenciando tormentas más intensas y episodios de lluvias torrenciales, muchas veces acompañadas de granizo de tamaño considerable.

    Ejemplo de esta situación se ha visto en recientes tempestades en puntos de Aragón y Cataluña, con lluvias y pedrisco fuera de temporada que han causado daños y rescates. Se espera que, si las condiciones atmosféricas son las adecuadas —con bajada de aire frío en altura al final del verano—, el impacto de este calor retenido en el mar se traduzca en fenómenos meteorológicos extremos.

    Un fenómeno global, pero con especial incidencia en el Mare Nostrum

    El Mediterráneo no está solo en esta tendencia. A nivel planetario, la temperatura media de los océanos (exceptuando los polos) ha marcado récords en los últimos años, situándose notablemente por encima de la media de las últimas décadas. Sin embargo, por su particular configuración, la cuenca mediterránea es especialmente vulnerable: se trata de un mar pequeño y cerrado, donde los cambios atmosféricos se trasladan rápidamente al agua, intensificando la velocidad y magnitud de los episodios de calentamiento.

    En concreto, la zona marítima de Baleares es la que más ha acusado el calentamiento, con un aumento de 1,3 ºC, el doble que el registrado en otras áreas marítimas de España. De hecho, en los últimos años los máximos históricos de temperatura superficial marina se han producido en 2022, 2023 y ya en lo que llevamos de 2025.

    Impactos ecológicos y sociales: fitoplancton, biodiversidad y economía

    El ascenso térmico marino no solo afecta al clima, sino que está teniendo consecuencias directas en los ecosistemas y las actividades humanas. Un reciente estudio ha puesto de relieve que en las dos últimas décadas la producción de fitoplancton en el noroeste mediterráneo ha caído en torno al 40%, debido sobre todo a cambios en los patrones de viento y el debilitamiento de los afloramientos de aguas profundas ricas en nutrientes. Estos organismos son cruciales porque capturan CO2 y forman la base de la cadena trófica marina, por lo que su descenso impacta también en pesquerías y en la producción de oxígeno.

    Además, la alteración del régimen de lluvias, el aumento de olas de calor, la presión sobre los recursos hídricos y la aparición de nuevas especies o la pérdida de biodiversidad son efectos colaterales que ya empiezan a verse tanto en el medio natural como en la economía de muchas zonas costeras.

    martes, 17 de junio de 2025

    Adiós a Windows 10, la memoria USB que puedes hacer tú mismo que revive al instante cualquier PC antiguo

     

    Muchos hogares todavía conservan un portátil antiguo, guardado y sin uso desde hace tiempo. Al encenderlo, el arranque se hace eterno, aparecen mensajes de actualizaciones que ya no puede instalar y su rendimiento lo hace prácticamente inutilizable. 

    Con el fin del soporte oficial para Windows 10 anunciado para finales de este año, todo apunta a que tu equipo quedará definitivamente obsoleto. Pero no tiene por qué ser así, puesto que aún puede tener una segunda vida, y no necesitas piezas nuevas, ni gastar dinero, ni conocimientos técnicos. 

    Solo te hace falta una memoria USB y unos minutos de paciencia. Con eso basta para instalar un sistema operativo moderno, rápido, seguro, pero sobre todo gratuito que hará que tu viejo portátil vuelva a ser útil. Literalmente, resucita con un solo clic.

    La alternativa de Google: un sistema operativo pensado para alargar la vida útil de tu PC

    El final del soporte de Windows 10 significa que a partir de octubre de 2025 no recibirás más actualizaciones de seguridad ni mejoras de rendimiento. Y aunque el ordenador seguirá funcionando, cada día estará más expuesto a vulnerabilidades, errores e incompatibilidades. 

    Este tipo de situación alimenta un fenómeno conocido como la obsolescencia programada. En este caso, hablamos de software, no de hardware, pero el efecto es el mismo. Un equipo que podría seguir funcionando perfectamente se vuelve inútil solo porque el sistema operativo queda desfasado. 

     

    ¿De verdad hay que tirarlo? ¿O hay otra salida? La hay, y se llama ChromeOS Flex, una solución creada por Google para quienes no quieren renunciar a un PC que todavía funciona. Se trata de un sistema operativo ligero, en la nube y totalmente gratuito, basado en el que ya utilizan millones de Chromebook en todo el mundo.

    Está pensado para dar una nueva oportunidad a ordenadores antiguos, tanto Windows como Mac, y lo hace con tres grandes ventajas: es rápido, no requiere mantenimiento y está siempre actualizado. Además, al estar centrado en el uso de aplicaciones web, no necesita grandes recursos. 

    Al final, es un sistema operativo que lo convierte en una opción perfecta para tareas diarias como navegar, escribir, enviar correos o estudiar, por lo que es una buena alternativa si ya quieres abandonar Windows.

    Cómo convertir una memoria USB en la herramienta que revive tu viejo portátil

    No necesitas ser técnico ni tener experiencia previa instalando sistemas operativos. Lo único que hace falta es un USB vacío de al menos 8 GB, conexión a internet y un poco de tiempo.

    Primero, puedes conocer más información sobre el sistema desde la página oficial de ChromeOS Flex. Luego, con la herramienta Chromebook Recovery Utility (que se instala como extensión en Google Chrome), creas un USB de arranque. Este paso es sencillo y está guiado paso a paso.

    Una vez creado, conectas el pendrive al ordenador antiguo, accedes al menú de arranque (normalmente con F12 o Esc) y eliges iniciar desde el USB. Desde ahí, puedes probar el sistema sin instalarlo o, si te convence, comenzar el proceso de instalación definitiva, que borra el disco antiguo y deja el equipo limpio y funcional.

     

    Todo el proceso dura menos de una hora y, en muchos casos, el resultado es sorprendente, con portátiles que tardaban cinco minutos en arrancar lo hacen ahora en menos de diez segundos, sin ruido de disco ni alertas de actualizaciones pendientes.

    ChromeOS Flex funciona especialmente bien en equipos con al menos 4 GB de RAM, procesador de 64 bits y fabricados a partir de 2010. Existe una lista oficial de modelos certificados, pero se puede probar en muchos otros con buenos resultados.

    ¿Qué puedes hacer con un ordenador con ChromeOS Flex?

     

    Quizá te preguntes si merece la pena, y la respuesta depende de lo que necesites. ChromeOS Flex no es un sistema para jugar a juegos demandantes, ni para usar programas muy especializados. Pero si lo que buscas es un portátil que puedas usar para internet, correo, ofimática, videollamadas, YouTube o Google Drive, cumple de sobra.

    Puede ser tu ordenador secundario, uno para los más pequeños de la casa, para tus padres o abuelos, o simplemente para seguir usando un equipo que ya dabas por perdido. Además, al estar basado en la nube, no necesitas preocuparte por virus, antivirus, ni mantenimiento

    Y todo se actualiza automáticamente en segundo plano. Un pequeño negocio puede usarlo como terminal de caja, un estudiante puede hacer todos sus trabajos desde ahí y una persona mayor puede tener su ventana al mundo, con lo básico para estar conectada sin complicaciones.

    Cada año, millones de ordenadores acaban en la basura no porque estén rotos, sino porque su sistema operativo ha quedado obsoleto y ya no pueden actualizar a Windows 11. ChromeOS Flex es un ejemplo claro de una solución sencilla, moderna y gratuita que te permite alargar la vida útil de tu equipo sin gastar un euro. Solo necesitas un USB y poco más.

    Cómo transformar un móvil viejo en un dispositivo útil (e inteligente) para tu casa


    En la mayoría de hogares, seguro que hay al menos un móvil viejo tirado en un cajón o incluso en el trastero. Y es que el avance constante de la tecnología hace que, cada poco tiempo, cambies de smartphone y el anterior acabe relegado al olvido, aunque aún funcione. 

    Cabe señalar que en un contexto donde el consumo genera toneladas de basura electrónica cada año, reutilizar tu dispositivo olvidado no solo es una decisión acertada, sino también una apuesta por la sostenibilidad tecnológica

    Por ello, convertir un smartphone antiguo en una herramienta útil para tu casa es más fácil de lo que imaginas y puede ahorrarte dinero, ayudar al planeta y sorprenderte con nuevas funciones. En lugar de comprar nuevos dispositivos, puedes reutilizar el terminal, ampliando la vida útil de la tecnología que ya tienes y apostando por un modelo de consumo más responsable

    Además del ahorro económicodarle una segunda vida al móvil te permite experimentar, pero también aprender, sin miedo, a estropear un dispositivo caro. El riesgo desaparece y las posibilidades de aprovechar el móvil en casa se multiplican.

    Cómo preparar tu móvil antes de darle una segunda vida

    Antes de lanzarte a transformar tu móvil antiguo en un dispositivo útil, es esencial ponerlo a punto. El primer paso es restablecer los datos de fábrica y limpiar el almacenamiento interno, eliminando archivos, así como aplicaciones innecesarias que solo ocupan espacio y ralentizan el sistema. 

    Si tu móvil lo permite, actualiza a la última versión disponible o instala apps ligeras que mejoren su rendimiento, especialmente en modelos antiguos. Recuerda también eliminar todas tus cuentas personales, así como revisar la configuración de privacidadpara evitar riesgos si decides compartir el móvil o conectarlo a servicios en la nube

    Por último, comprueba el estado de la batería. Si apenas dura, puedes usar el móvil enchufado permanentemente, ya que para muchos usos domésticos no necesitas movilidad. Todo esto es crucial para evitar problemas de seguridad y asegurarte de que el smartphone funcionará de forma fluida en su nueva función.

    Usos inteligentes para reutilizar un móvil en casa

     

    Reproductor multimedia: Con aplicaciones como SpotifyVLC o cualquier reproductor de pódcast, puedes convertir el móvil en un reproductor exclusivo para música o audiolibros. Colócalo en la cocina, el baño o el garaje, y enlázalo con altavoces Bluetooth. De esta manera, tu móvil principal se libera de tareas secundarias y mantienes tus listas y contenidos preferidos siempre a mano.

    Agenda digital: Fijando el móvil a la nevera con un soporte magnético o en una pared visible, puedes usarlo como panel de recordatorios, calendario familiar y lista de tareas. Apps como Google Calendar, Trello o Any.do permiten que toda la familia vea, edite y añada recordatorios en tiempo real, facilitando la organización y evitando despistes.

    Monitor de bebés: Utilizando la cámara, así como el micrófono del dispositivo junto con apps especializadas, el móvil se convierte en un eficaz monitor de bebés o intercomunicador entre habitaciones. Puedes escuchar, así como ver lo que ocurre en otra estancia, hablar desde tu móvil principal y supervisar a los más pequeños o a personas mayores de forma sencilla.

    Centro de control domótico: El smartphone puede transformarse en un mando universal para controlar luces, enchufes, altavoces y otros dispositivos inteligentes mediante apps como Google Home o Alexa. Así, centralizas la gestión del hogar conectado y evitas depender siempre del móvil principal. Además, puedes programar rutinas o personalizar el control de casa.

    Cámara de vigilancia: Uno de los usos más populares para un móvil viejo es convertirlo en cámara de seguridad para el hogar. Gracias a apps como IP Webcam, puedes monitorizar cualquier habitación de forma remota y recibir alertas de movimiento en tiempo real. Esta opción resulta muy útil para vigilar la habitación de los niños o a tus mascotas cuando no estás presente.

    Antes de pensar en comprar otro gadget, revisa ese viejo móvil que ya no usas. Quizá no sea el más moderno, pero con una mínima preparación, puede convertirse en una herramienta útil en tu día a día. A veces la mejor tecnología ya está en tu cajón, y reutilizar es cuidar el planeta, ahorrar dinero y ser más ingenioso con los recursos que ya tienes a mano.


    España podría estar convirtiéndose en un basurero europeo: Vamos en la dirección contraria

     ecoticias

    España podría tener un tesoro invaluable bajo esta tierra: 5,5 billones de toneladas

     ecoticias


    Canal Noticia : El impuesto que podría provocar que la gasolina aumente hasta los 2 euros por litro en 2027

      Noticias20M Para el año 2027 se espera que  el precio de la gasolina incremente hasta dos euros por litro , lo que supondría una subida en...